dice una lectora.
Las puertas de la Biblioteca Pública de la ciudad se cerraron este sábado, a las 14,00 horas, como cualquier otro sábado. O casi, porque mañana no se abrirán de nuevo.
Después de 41 años en la calle Concejo, la casa lectora de los ourensanos se muda a San Francisco. Pese a los carteles informativos, muchos fueron los lectores que ayer se sorprendían al entrar en el edificio. "Sabía que cerraba pero no que era tan pronto... Da un poco de penita, son muchos años viviendo aquí a buscar libros", decía una usuaria habitual en la puerta. "Os lectores máis reticentes quéixanse da nova ubicación, pero entre o que poida facer o Concello, coas liñas de bus, e o que fagamos nós, esperamos que a xente se anime, a filosofía vai ser a mesma, pero con moito máis espazo", señala Rosa María Díaz, directora de la entidad. "A nova biblioteca é moito máis agradable ca esta... Da gusto", aseguran los trabajadores.
“Es un lugar muy especial"
La Biblioteca propuso, hace semanas, un concurso de relatos y fotografías para que los usuarios se despidiesen del espacio, una propuesta que contó con numerosa participación. "Ya dejamos nuestros relatos en la urna, y nos vemos en la nueva biblioteca", se despedían dos lectoras habituales. "Es como cambiarte de casa, cuesta... Te tienes que acostumbrar a lo nuevo y yo llevo desde pequeñita viniendo aquí a coger libros", dice Fátima Fernández. "Yo empecé en la sala infantil en sexto de primaria, y ya empecé a coger libros... Da penilla despedirse", señala Lorena Rodríguez.
La última jornada de Concello se vivió con emoción, tanto por el cierre como por la nueva apertura. "Este es un lugar muy especial, es una segunda casa", apunta Alba Ortega, que estudia en la biblioteca desde hace más de un año. Para los opositores, el cierre de la biblioteca también supone la necesidad de buscar otro espacio, mientras no se abra la nueva sede.
La apertura
"Aínda non sabemos a data de apertura, pero esperamos que sexa en decembro, canto antes", afirma Díaz. "Aos usuarios vailles gustar moito o novo edificio, e nós temos moitas ganas", dice Zoraida Mojón, bibliotecaria.
