Desde Ourense: una cabalgata que lleva a otro planeta, al mundo "real"

La llegada de los Reyes ilumina el día con una dosis de magia especial. Propia de un día único, no de uno cualquiera. Sobre todo a los ojos de aquellos niños que llevan esperando semanas para ver a sus majestades y pedirles ese último deseo en forma de regalo. Los despistados acuden a la cabalgata para entregar en mano su carta o a propia voz, como centenares de jóvenes lo hacían en Ourense por la calle Progreso. Sus Majestades recogen con cariño, con atención y sobre todo con sus mejores deseos las misivas de los pequeños.

Tras el aviso en forma de paseo de los carteros, que venían con las cartas ya entregadas a Oriente y que siempre acompañan a los Reyes para que no se olviden de lo más preciado, los regalos entregados con ilusión. Los de Ourense, pero también del resto del mundo.  

Los pajes se encargaron de dar ritmo y color, pero sobre todo seguir contagiando la magia de la cabalgata

Los planetas y las estrellas, temática principal de la cabalgata de este 2018 en la ciudad de Ourense, no tardaron en aparecer. Los pequeños y no tan pequeños miraban con atención y sobre todo con su mejor mirada. Con esos ojos de ilusión que disfraza la felicidad. Aunque lo más bonito era las sonrisas que seguían esperando por los personajes principales. No tardaron en llegar. Aunque por delante de ellos, los pajes se encargaron de dar ritmo y color, pero sobre todo seguir contagiando la magia. 

Los Reyes, en sus respectivos tronos, saludaron a los más pequeños. Con asombro, les devolvían un gesto cómplice. Ahora, era el turno de verlos y quién sabe si volver a decirles que habían sido buenos y que el carbón debería esperar un año más. Los Reyes cubrieron el recorrido por las calles de Ourense con su mejor sonrisa y con el sentimiento del trabajo bien hecho. Un año más han cumplido con su trabajo y entregaron a Ourense regalos, ilusión, caramelos y sobre todo felicidad, la que nunca debe faltar.