La ciudad, y especialmente el Casco Vello, vive momentos tensos en el sector hostelero, mermado tras más de dos meses de cierre obligado. A esto se añade el conflicto por el uso de las licencias y las diferencias entre café bar (cafeterías) o café bar especial (pubs). La Concejalía de Urbanismo cerró este miércoles un nuevo establecimiento, O Pica Pao dos Larpeiros, en la plaza Saco y Arce.
Es solo uno de los casos que se podrían ir añadiendo en los próximos días. Los cafés bares especiales no pueden abrir hasta el día 1 de julio –a no ser que tengan terraza– mientras que tienen licencia de café-bar sí pueden hacerlo, también en el interior, pero sin la música como reclamo. El problema es que algunos han sido localizados extendiendo el horario y ejerciendo de pubs, algo que causa recelo en algunos hosteleros a los que no se les permite abrir.
Parálisis de tres meses
La Concejalía de Urbanismo está dispuesta a acabar con esta situación, y con cualquier abuso que se produzca, y avisa: "El que no cumpla las licencias, tendrá que cerrar". Así lo expresa la titular de este departamento en el Concello, Sonia Ogando, que tiene bastantes expedientes sobre la mesa que irá resolviendo "poco a poco, cada vez más rápido". Y es que durante el estado de alarma se paralizó la situación, pero ahora vuelve a avisar: "No me temblará el pulso".
En este sentido, Urbanismo extremará la vigilancia a partir de este fin de semana y lanza una advertencia. "Si alguien no cumple con lo que dicta su licencia, tendrá que reinventarse". En todo caso, Ogando muestra su apoyo al sector hostelero: "Es un motor de nuestra economía y tiene todo mi apoyo, siempre y cuando cumplan con su licencia".
Urbanismo precintó ayer el Pica Pao dos Larpeiros, en Saco y Arce, por carecer de licencia de apertura, mientras ejercía la actividad de café-bar especial. Aunque llevaba meses abierto, desde el pasado mes de septiembre, el estado de alarma paralizó su expediente, ahora resuelto. Hace una semana era el pub Moskow, en la calle Luna, el que se precintaba. Y quedan más expedientes sobre la mesa, y vendrán más cierres. "No permitiremos que no se cumpla la ley", apunta Ogando.
La polémica llega también en por qué cierran algunos locales antes que otros:"Estamos empezando por los que más denuncias tienen".
Buscar el entendimiento
"Mi objetivo es que los hosteleros entre ellos se lleven bien y, por supuesto, que vecinos y hosteleros, también.
