OURENSE

El Valedor reprende al alcalde por su demora al informar de una calle

Lo declarará "hostil" si no le informa en cinco días sobre A Ermida

La demora del Concello de la ciudad en remitir un informe al Valedor do Pobo sobre la situación de la calle A Ermida, en Mariñamansa, ha llevado a la institución gallega a remitir una advertencia al alcalde, Agustín Fernández, para que le envíe el documento "reiteradamente requerido" en un plazo de cinco días si no quiere ser "declarado hostil e entorpecedor das súas funcións (de las del Valedor)".

Así lo explica el valedor en funciones, José Julio Fernández, a las vecinas de la calle que le remitieron una queja sobre el mal estado en el que esta se encuentra. Según consta en la respuesta del Valedor, esta institución requirió un informe complementario del Concello a través de escritos enviados a la entidad municipal los pasados 7 de noviembre y 7 de enero. A pesar de eso, el Valedor subraya que "aínda non se recibiu o informe reiteradamente requerido nin ningunha comunicación xustificativa de tal atraso".



El problema

En realidad, el asunto se remonta a 2011, cuando varias vecinas de esta calle presentaron las primeras quejas. No obstante, la situación continúa igual que entonces. "El barrio está hecho un desastre. La carretera tiene unos baches tremendos, tanto en A Ermida como en Papón y A Farixa de Arriba", dice Luisa Domínguez, que se queja también del mal estado de un muro y de los problemas que les acarreó en su día el movimiento de tierras de la zona donde se planeaba el centro comercial de Eroski. La vecina se lamenta de que "no nos han hecho caso ninguno, a ver si poniéndole la cara colorada al alcalde (con la queja al Valedor) nos arregla la calle".

El Concello ya ha respondido en ocasiones anteriores al Valedor do Pobo en relación a las quejas presentadas por estas vecinas. En una primera comunicación, la institución municipal confiaba en que la ejecución de las obras de urbanización del ámbito acabaran con los problemas que afectaban a los vecinos y comunicaban que ya había abierto un expediente de disciplina urbanística por algunos de los daños que se comunicaban en la queja.

No obstante, los vecinos consideraban que la situación de la calle no había mejorado, por lo que volvieron a insistir ante el Valedor, al que el Concello remitió un informe en mayo de 2013 en el que se aseguraba que las obras de mantenimiento sí las realizaba la brigada municipal -reparando baches- pero que correspondía a los propietarios de los terrenos subsanar los daños de la urbanización. También el PP instó en reiteradas ocasiones a que se arregle la calle.

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