La maleza y el silencio son dos denominadores comunes en el día a día de la Fortaleza de Monterrei y las torres limianas de A Pena (Xinzo de Limia), A Forxa (Porqueira) y Sandiás.
Las piedras centenarias que han sido testigo de innumerables guerras luso-galaicas descansan, desde hace unas semanas, bajo la protección y el cobijo de la Xunta después de años de protección estatal. Nuevos guardianes que tendrán que trabajar a fondo para que este rico y variado patrimonio arquitectónico civil no caiga en el olvido como consecuencia de pistas en mal estado y maleza que gana metros día a día. Pero que, según reconocía ayer el conselleiro de Cultura, Roberto Varela, no tiene planes concretos para afrontar las reformas.
El traspaso de titularidad ha pasado desapercibido para los vecinos de estos enclaves que integran un museo abierto sobre la arquitectura civil ourensana. No así para las administraciones locales, que han recibido con optimismo el anuncio, aunque esperan que se complete con financiación que abogue realmente por su recuperación.
falta de financiación
Según el acuerdo alcanzado, el Castillo de Monterrei debería albergar un centro de divulgación, innovación y promoción de la moda, del vino, de las aguas medicinales y las tradiciones 'arraianas'; mientras que las torres de A Limia serían restauradas con el objetivo de potenciar su atractivo turístico. Sin embargo, por el momento, las únicas actuaciones previstas por la Xunta de Galicia pasan por acometer la mejora de los accesos e iluminación en las torres de A Limia y labores de conservación de la torre de Monterrei (sólo limpieza de la vegetación y de mantenimiento).
No es de extrañar que la falta de una partida presupuestaria anexa a este acuerdo, preocupe -y mucho- a los regidores locales. 'Levamos anos pedindo unha actuación que recupere a fortaleza e tamén as vivendas abandonadas do seu arredor', confiesa el alcalde de Monterrei, José Luis Suárez, para quien este anuncio 'sin cartos' no soluciona nada. Mientras, el Concello de Verín aprobó ayer solicitar la aplicación del 1% cultural procedente de la nueva autovía a Feces a la mejora, entre otros, del castillo de Monterrei. Es que en Monterrei, un laberinto de casas abandonadas y pistas en dudosas condiciones para su circulación son el preludio del Castillo. 'Aquí no tenemos un turismo de masas, pero sí hay un goteo constate de visitantes', matiza su guardiana , Lupe Cortinas, quien cada mañana sigue un ritual de controlar las diferentes puertas y puntos de luz. 'Rara es la semana que no contamos un destrozo de un foco o un intento fallido para entrar en el museo', asegura. Y los vándalos no son los únicos causantes de los daños en la fortaleza. El pasado invierno el ciclón 'Cynthia' arrasó con parte del tejado del palacio del siglo sin que, por ahora, nadie se haya hecho cargo de su reparación.
El traspaso de titularidad ha pasado desapercibido para los vecinos de estos enclaves que integran un museo abierto sobre la arquitectura civil ourensana. No así para las administraciones locales, que han recibido con optimismo el anuncio, aunque esperan que se complete con financiación que abogue realmente por su recuperación.
falta de financiación
Según el acuerdo alcanzado, el Castillo de Monterrei debería albergar un centro de divulgación, innovación y promoción de la moda, del vino, de las aguas medicinales y las tradiciones 'arraianas'; mientras que las torres de A Limia serían restauradas con el objetivo de potenciar su atractivo turístico. Sin embargo, por el momento, las únicas actuaciones previstas por la Xunta de Galicia pasan por acometer la mejora de los accesos e iluminación en las torres de A Limia y labores de conservación de la torre de Monterrei (sólo limpieza de la vegetación y de mantenimiento).
No es de extrañar que la falta de una partida presupuestaria anexa a este acuerdo, preocupe -y mucho- a los regidores locales. 'Levamos anos pedindo unha actuación que recupere a fortaleza e tamén as vivendas abandonadas do seu arredor', confiesa el alcalde de Monterrei, José Luis Suárez, para quien este anuncio 'sin cartos' no soluciona nada. Mientras, el Concello de Verín aprobó ayer solicitar la aplicación del 1% cultural procedente de la nueva autovía a Feces a la mejora, entre otros, del castillo de Monterrei. Es que en Monterrei, un laberinto de casas abandonadas y pistas en dudosas condiciones para su circulación son el preludio del Castillo. 'Aquí no tenemos un turismo de masas, pero sí hay un goteo constate de visitantes', matiza su guardiana , Lupe Cortinas, quien cada mañana sigue un ritual de controlar las diferentes puertas y puntos de luz. 'Rara es la semana que no contamos un destrozo de un foco o un intento fallido para entrar en el museo', asegura. Y los vándalos no son los únicos causantes de los daños en la fortaleza. El pasado invierno el ciclón 'Cynthia' arrasó con parte del tejado del palacio del siglo sin que, por ahora, nadie se haya hecho cargo de su reparación.
