Los datos del paro de marzo revelan la crudeza laboral que ha llegado de forma abrupta, pero esta aparece modulada. Las cifras del Ministerio de Trabajo no tienen en cuenta el aluvión de Expedientes de Regulación de Empleo (ERTE) tramitados desde la declaración de estado de alarma dictado por el Gobierno el día 14 (14.573 trabajadores afectados hasta ayer).
Aún así 925 parados se han añadido al registro del Ministerio de Trabajo, con lo que ahora son 19.322 los que constan como desempleados, lo cual supone una subida de un 5,03% en un solo mes y ya casi se amortigua el descenso de casi todo el año porque quedan ahora solo 57 menos que hace un año. Solo la agricultura se ha salvado, con 23 parados menos, mientras que en industria la subida es de 74 personas, 58 en construcción y 785 en el sector servicios.
La Seguridad Social también apunta un dato muy negativo: 868 afiliados menos en un solo mes, con lo que la cifra total se queda ahora en 101.351 afiliados en la provincia. Sin embargo, hay un regate estadístico en el dato. El Ministerio facilita la cifra media del mes, pero reconoce que la trayectoria era positiva hasta la crisis del coronavirus, con lo que se da por hecho que la segunda quincena ha sido letal para las cotizaciones.
Se nota por ejemplo en algunos sectores como la industria que mantenía una velocidad de crucero importante en Ourense, con importantes incorporaciones desde el comienzo del año. Sin ir más lejos, un millar de nuevos contratos en febrero, que ya fueron solo 919 en marzo.
La cifra se quebró con el estallido de la crisis sanitaria desde mediados de mes y en vez de incorporaciones aparecieron las suspensiones de empleo. De ahí que la contratación aparezca con menos daños de los que realmente sufrió. Hay descenso, pero no debacle.
En la provincia se hicieron en marzo 4.381 contratos, 1.519 menos que en febrero, un descenso del 25,75%. Sectores dinámicos como el de servicios firmaron 3.100 nuevos contratos (menos que la media del mismo mes de otros años), mientras que la construcción hizo 182 y agricultura 180.
También, en relación al mismo mes del año pasado el descenso fue de 1.366 contratos menos, con una caída del 23,77%. Marzo siempre fue el del pistoletazo de salida de la contratación temporal gracias a la Semana Santa y el preludio de una estacionalidad que caduca habitualmente el septiembre u octubre. Este año no solo ha caído la contratación sino que las incorporaciones de la primavera este año no se harán. Por lo tanto, el agujero del empleo es mayor.
Las cifras no han pillado por sorpresa ni a políticos ni a agentes sociales. Entre los sindicatos, UGTO teme lo peor: "a irrupción do coronavirus no mercado de traballo nos fará retornar a cifras de desemprego de tempos da última crise", dice Mario Franco, secretario comarcal del sindicato.
Si se cumplen sus pronósticos Ourense podría llegar de nuevo a los 30.000 parados, como ya sucedió algunos meses del 2013. Para llegar a esa cifra el margen es de unos 9.000 desempleados. En todo caso, el impacto laboral será mayor cuanto más se tarde en atajar la crisis sanitaria.
En España
Los datos en España han sido malos sin paliativos. Suman 300.000 parados más. Uno de los diagnósticos sobre la situación lo hizo ayer el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, que ha apuntado que en 14 días se ha registrado casi el mismo descenso de afiliados a la Seguridad Social (833.979) que entre octubre de 2009 y febrero de 2009, cuando el descenso superó las 900.000 personas.
Así, ha apuntado que la destrucción de empleo fue "particularmente intensa" en los primeros días después del estado de alarma y luego se provocó una ralentización de la misma, que coincide con el momento en el que empezaron a entrar en vigor los ERTE.
En Galicia
En la comunidad gallega, la paralización casi absoluta de la actividad económica como consecuencia de la pandemia también está pasando factura al mercado laboral y no se salva de las devastadoras consecuencias, ya que 8.252 personas han pasado a engrosar en marzo la lista de desempleados, un 4,96 % superior al mes anterior, según los datos del Ministerio.
El paro en la comunidad alcanza las 174.481 personas, 3.640 más respecto a marzo de 2019, un incremento de 2,13 puntos en términos relativos. Esta cifra no recoge, sin embargo, las consecuencias de los empleos que se pierden de forma temporal hasta que se levante el estado de alarma.
