MEDIO AMBIENTE

Un vivero en Ourense sirve plantas para reforestar bosques españoles

VIVEIRO DE TRAGSA EN MACEDA (OURENSE). 26/10/2017. Visita guiada a las instalaciones del viveiro de Tragsa en Maceda. LAREGIÓN/Óscar Pinal
photo_camera Visita guiada a las instalaciones del viveiro de Tragsa en Maceda.

Dicha infraestructura, que celebra su primera jornada de puertas abiertas para dar a conocer su "compromiso con el medio natural y el mundo rural, supone una infraestructura única en toda España"

El vivero del Grupo Tragsa en el municipio ourensano de Maceda produce 4,5 millones de plantas anuales para reforestación de los bosques españoles y, en los últimos años, ha servido 26 millones de ejemplares a distintos puntos de la geografía.

Este vivero, que celebra su primera jornada de puertas abiertas para dar a conocer su "compromiso con el medio natural y el mundo rural, supone una infraestructura única en toda España, con 9 hectáreas de extensión. En ellas, se trabaja en el cultivo y generación de los árboles que luego se utilizan para repoblar los bosques dañados de todo el país.

De hecho, el vivero de Maceda, que dispone de varios invernaderos y un laboratorio de investigación, tiene capacidad para producir 4,5 millones de plantas anualmente. Estas instalaciones contemplan dos modos de producción de planta: la que se cultiva de manera habitual y la que se genera por encargo.

Según explican los responsables del vivero, en estas naves, gracias al desarrollo de sus instalaciones y procesos, puede obtenerse casi cualquier tipo de vegetal "a la carta", ya que está capacitado para producir la mayor parte de las plantas forestales, ornamentales y de fruto, bien por métodos tradicionales o biotecnológicos.

Producción a la carta y auditoría

La producción de planta "a la carta", una de las señas de identidad de este vivero, constituye una herramienta fundamental para poder repoblar las zonas afectadas con especies vegetales autóctonas, más resistentes y mejor adaptadas a sus ecosistemas. La recolección previa de semillas en diferentes espacios naturales permite que se puedan generar nuevas plantas con unas características idénticas a las dañadas, lo que contribuye a mantener un equilibrio medioambiental.

Otro de los hitos señalados de este vivero es la reciente superación de la auditoría para conseguir la acreditación EMAS (Esquema Europeo de Gestión y Auditoría Medioambiental). Un certificado que, además de probar la implantación de un sistema de gestión ambiental, le permitirá desarrollar su actividad futura con unos estándares superiores en términos de calidad, sostenibilidad y transparencia.

Centro de mejora

Además, desde el año 2003, el vivero de Maceda dispone de un Centro de Mejora y Desarrollo Agroambiental (CEMDA), donde se realizan proyectos de investigación para la creación de especies vegetales más resistentes a plagas y enfermedades. En el ejercicio de esta actividad, el Grupo Tragsa ha contribuido al desarrollo tecnológico del sector, "situándose a la vanguardia de la investigación y la innovación forestal", asegura la empresa que pertenece al Grupo SEPI y que supone un holding empresarial con 15 empresas públicas y con una plantilla de 73.000 profesionales en 2015.

Con un equipo multidisciplinar formado por 14 personas de distintas ramas de la ingeniería forestal, el vivero de Maceda lleva dos décadas al servicio de las administraciones sirviendo plantas en numerosas actuaciones. Algunas de ellas, han sido la recuperación medioambiental de las zonas incendiadas en Laza (Ourense) donde se trasplantaron 350.000 unidades o la restauración de las explotaciones mineras a cielo abierto en León, donde se emplearon alrededor de 200.000 ejemplares.

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