CRÍTICAS

Las viviendas protegidas de Xestur Ourense: el calvario continúa

Las deficiencias de origen en Santa Marta y Rafael Dieste han colmado la paciencia de los residentes

Las viviendas protegidas de protección autonómica promovidas por Xestur Ourense hace más de una década en la rúa Rafael Dieste, anexa a Julio Prieto Nespereira, en el casco antiguo, y en la urbanización de Santa Marta, en Pereiro, han acabado con la paciencia de muchos vecinos. Algunas de las múltiples deficiencias fruto de los vicios constructivos en origen se han ido arreglando gracias a sentencias favorables, aunque decenas de residentes siguen sufriendo las consecuencias de un pésimo diseño, cuando no ha optado por huir.

A finales de 2005, Juan Carlos Cabanelas abandonaba la gerencia de Xestur Ourense y, ese mismo año, el Consello de Contas emitió un informe en el que apuntaba a la situación de "quiebra técnica" en la que estaba la empresa pública. Todo esto, en un tiempo en el que se produjo la adjudicación de obras para estas viviendas sin disponer aún de terrenos.

Como herencia de la deficiente planificación, permanecen las filtraciones, humedades, ampollas en la pintura o grietas que pueden apreciarse en multitud de viviendas de Santa Marta. Muchas deshabitadas y con el cartel de Se Vende.  "Aquí hai moitos que decidiron marchar. Arredor do 20% dos que entraran xa se foron. E dentro de 30 anos aquí non vai quedar ninguén", lamenta Enrique Rey, en cuya casa se aprecian las consecuencias, con presencia de grietas y humedades. 

Esta situación se reproduce en la rúa Rafael Dieste. "Es un desastre, no sé a quién se le ocurrió diseñar esto. No nos da el sol, hay condensación de agua que producen empañamiento en las ventanas, siguen las humedades...", confiesa una de las vecinas. "El aislamiento brilla por su ausencia y las tarimas siguen levantándose, hay cosas que se hicieron mal desde el principio", lamenta. En los garajes, los días de lluvia "las goteras campan a sus anchas" y las zapatas en las columnas reflejan déficit de construcción. Además, los bajos abandonados provocan una imagen desoladora que da buena cuenta de una falta de planificación en un proyecto que nació viciado. 

XESTUR CONDENADA EN 2015 A REPARAR LOS DEFECTOS

En 2015, Xestur Ourense fue condenada a realizar importantes reparaciones Rafael Dieste , al estimar el juez parte de las pretensiones de los propietarios, que denunciaron múltiples deficiencias en la dirección de obra y en la construcción. En el largo listado de deficiencias, los propietarios detallaron humedades y condensaciones en numerosas zonas, problemas con los alicatados, guías de puertas mal colocadas, abombamientos y hundimientos de tarima, deficiente aislamiento, pasillos estrechos, mala colocación de los embellecedores del suelo, ausencia de accesorios en los baños... Algunos vecinos manifiestan que parte de las mismas se mantienen hoy y, pese a que reconocen que se han acometido algunas obras para frenar las humedades, queda mucho por hacer.  En Santa Marta, más de lo mismo. "Os que fomos protestando e levando as cousas ao xulgado foron arranxando, pero o da pintura segue sendo lamentable", aseguraba ayer una residente. 

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