La Xunta hará “axustes" al proyecto de senda de Reza

Vecinos de Reza, reunidos ayer con Gabriel Alén y Francisco Menéndez.
photo_camera Vecinos de Reza, reunidos ayer con Gabriel Alén y Francisco Menéndez.
Trasladan a los vecinos la voluntad de causar el menor impacto posible

Los vecinos de Reza fueron ayer recibidos por representantes de la Xunta de Galicia, que les trasladaron que limitarán "en todo o posible" las afecciones que les supone la ejecución de proyecto de senda peatonal, ya aprobado y publicado en marzo en el Diario Oficial de Galicia. 

El delegado territorial de la Xunta, Gabriel Alén, y el director  de la Axencia Galega de Infraestruturas, Francisco Menéndez, se reunieron con miembros de la asociación de vecinos Quince de Agosto de Reza, a los que explicaron detalladamente la nueva senda en la OU-402, cuya inversión ascenderá a 1,1 millones de euros. 

Los representantes autonómicos defendieron que han actuado con "máxima transparencia" y recogiendo las "achegas" vecinales, gracias a las cuales modificaron al proyecto inicial haciéndolo ahora exclusivamente peatonal. 

Ante los vecinos, Alén y Menéndez explicaron que la actuación redundará en "reforzar a seguridade viaria" y "favorecer os desprazamentos a pé dos veciños, dispoñendo de beirarrúas, novas zonas de aparcadoiro e paradas de autobús". 

En todo caso, abrieron un canal de comunicación "permanente" con los vecinos y les avanzaron que durante la construcción de la senda se harán "pequenos axustes" para reducir lo máximo posible su afectación. 

El proyecto se desarrollará en un tramo de 2,7 kilómetros que atraviesa Reza, que actualmente no dispone de aceras a ambos lados de la calzada, por lo que los peatones transitan por los arcenes. 

Los vecinos se han opuesto siempre a esta senda, ya que lo que piden desde hace 12 años es la continuidad de las aceras, existentes en el primer tramo de la carretera de Reza, y no una senda no solicitada que creen que tendrá un "alto impacto" en las viviendas, al restarle parte de su terreno. 

Técnicos revisarán in situ los posibles cambios a realizar

La asociación de vecinos inició ayer la consulta a los vecinos afectados y espera transmitir una decisión sobre si aceptan las condiciones en una semana. Técnicos de la consellería revisarán in situ cómo afectará a cada uno de los cierres el proyecto y si se pueden ajustar, tras lo cual se verá si dan luz verde a estas modificaciones. De momento, valoraron las buenas intenciones de la Administración. 

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