“No tenemos seguridad para comprar un piso"

Esa inseguridad económica que señalan desde Fegein como razón última del crecimiento del mercado de alquiler es la que viven personas como Lorenzo Prada, ourensano que trabaja como cocinero y vive con su pareja y la niña pequeña de ésta. Prada se ha decidido por el alquiler porque "la situación económica no es buena, los trabajos no son fijos y los sueldos no son tan altos como para invertir en una vivienda".

Este joven acaba de firmar un alquiler de un piso en la ciudad. "Escogimos esta fórmula, primero por que no tenemos seguridad económica para comprar una casa y tampoco nos iba a financiar ningún banco", explica Prada, que reconoce que "no quería encontrarme en la situación de tener que abandonar un piso hipotecado por falta de pago".



Los otros pagos

Él y su familia no tienen que afrontar los pagos de contribución, derramas de la comunidad o mensualidad de ésta, "y si no puedo pagar, aviso a la inmobiliaria y dejo el piso". Es la opción cada vez más escogida por los jóvenes ourensanos.