La Policía Nacional ha desarticulado, con la detención en Madrid de cuatro personas, un grupo dedicado a la confección de entradas falsas para macroconciertos que luego vendían por internet, simulando que las habían comprado pero no iban a utilizarlas.
Según ha informado hoy la Jefatura Superior de Policía, los ahora arrestados tenían un taller casero para la impresión de entradas falsas y varios móviles en los que recibían las llamadas de las personas interesadas en adquirirlas, pensando que eran entradas auténticas que se ofrecían en reventa.
Los cuatro arrestados -tres hombres y una mujer de entre 19 y 32 años y nacionalidad española- ofrecían las entradas en conocidas páginas web y, como se trata de una práctica ilegal, la enmascaraban con anuncios en los vendían objetos como bolígrafos a un alto precio, con los que casualmente regalaban una entrada para el concierto.
Cuando quedaban con los compradores les enseñaban resguardos de compra, a veces reales y a veces falsos, para justificar la autenticidad de las entradas y no levantar sospechas.
La investigación comenzó cuando una persona denunció que había comprado seis y cuatro entradas, respectivamente, a dos personas que las ofrecían por internet. Eran para el concierto de Bruno Mars que este cantante ofreció el pasado 15 de noviembre en el Palacio de Vistalegre.
Ya en su casa comprobó que ambos vendedores le habían dado un ticket de compra idéntico para justificar la autenticidad de las mismas, lo que le hizo sospechar que la entradas no eran auténticas.
La empresa distribuidora oficial verificó la falsedad de las diez entradas y colaboró con los agentes, que finalmente identificaron y detuvieron a los presuntos autores de la estafa.
En los registros practicados en los domicilios de dos de ellos se intervinieron un total de 22 tickets en blanco que presuntamente iban a utilizar para imprimir entradas para un importante concierto que se celebrará el año que viene en la capital.
También intervinieron varios tickets de compra, dos impresoras de alta resolución, pendrives, discos duros y varias entradas pertenecientes a distintos espectáculos musicales previstos en Madrid.
Muchas de las entradas incautadas habían sido impresas con papel original y numerado que había sido sustraído previamente a un comercio de Córdoba, encargado por la empresa distribuidora de confeccionar los tickets originales.
La Policía Nacional ha advertido de que la venta de entradas falsas es una práctica delictiva muy peligrosa no sólo por el perjuicio económico causado al consumidor sino por el riesgo que puede entrañar una venta incontrolada para un evento.
Por eso ha aconsejado comprar las entradas en establecimientos autorizados y dentro del circuito legal, verificar la autenticidad con los organizadores del concierto si se tiene alguna duda y desconfiar de entradas que se vendan a un precio excesivamente más bajo que el precio de mercado.
También recomienda observar la entrada minuciosamente, su calidad, imágenes e impresión, especialmente si hay errores de ortografía, de puntuación o gramaticales o si el código de barras está desenfocado.
Se puede comprobar así mismo si las entradas oficiales del evento al que se va a acudir tienen algún holograma o marca de agua específico.
