Un priorato en discordia con el próximo castillo

Lugar donde está emplazado el Castelo de Ribeira o de Ouvigo.
photo_camera Lugar donde está emplazado el Castelo de Ribeira o de Ouvigo.
Nos hallamos en uno de esos altonazos sur que rodean A Limia Alta por donde va a discurrir esta ruta circular que comienza en Mosteiro de Ribeira, priorato de escasos monjes que a modo de granja dependía de otro poderoso, el de Celanova, y finaliza en el mismo lugar. 

Una subidilla entre carballos y el acceso al primer otero donde se supuso el castillo, lugar de densa vegetación de acebos de difícil la penetración. Acúmulos de piedras sueltas hacen suponer que aquí el castro y castillo de Ribeira, si no fuese que más arriba en la cota 900, hoy antenada, y donde se borró todo vestigio castellano, sea porque los vecinos llevasen sus piedras para levantar sus casas, sus muros... La ruta se mete en el último tramo entre la densísima frondosidad de carballos que aun en la invernía pocos rayos solares atraviesan.

Desde Xinzo alcanzamos, dirección sur, a los pocos kilómetros Mosteiro, del que resta una recia casona, de lo que fue priorato allá por el X, regido por Celanova y de comunidad tan reducida que en los últimos tiempos solamente el prior, que no residía en el pequeño monasterio que en frecuentes disputas con el cercano castillo de Ribeira sobre el dominio, o más bien cobranza de tributos de las tierras bajas adyacentes. Aquí mismo estacionamos para emprenderla en dirección sur hacia la cima arbolada de la que emergen las hoy antenas cuando ayer las almenas del más poderoso castillo límico: el Castelo de Ribeira.  Vamos ascendido por pista, hacemos, a los 2 kilómetros, un alto para explorar el primer otero entre la densa vegetación de acebrales y canchales amusgados. Aquí pudiera emplazarse el castillo, pero donde ubicado con más probabilidad donde hoy unas grandes antenas de telecomunicaciones, más arriba. Es fácil orientarse en el camino de pista térrea hasta acceder al antenado lugar de Ouvigo como se llamaba también el Castelo por la aldea cercana o viceversa. El castillo, como consta documentalmente, fue erigido por el conde Gotierre Menéndez o Mendes, padre de San Rosendo, allá por el X, impulsado por Ordoño II, pasaría a dominio episcopal, como su par de Porqueira, construido en el XII, lo demolerían Os Irmandiños avanzada la segunda mitad del XV; pasaría, reconstruido, a los Zúñiga, de Monterrei, luego abandonado  y sus piedras aprovechadas por los vecinos limítrofes hasta no dejar rastro de lo que fue el más potente castillo de a Limia.

Continuamos en estas alturas de los 900 m. y empezamos a bajar ligeramente hacia Soutelo o Souteliño de Ribeira. En este descenso, por intransitado asfalto, viramos a derecha donde una forestal pista se abre y nos introducimos en su frondosidad, en gran parte herbosa entre pinos y más carballos que nos transporta por la amenidad del sotobosque dejando a izquierda el arroyuelo de Mosteiro, que ni rumorosidad desprende, que antes de rendirse al Limia, solo cuando con aguas por las pluviosidades más rigurosas, y que paralelo a otro regato, el de Regoalde, se entrega al Limia. Nosotros nos rendimos al paraje y al mosteiro de Ribeira, a Sta. María consagrado, cuando arribamos de miembros relajados.

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