Dos hermanas denunciaron al Ayuntamiento de Barcelona por ceder el cementerio de Sants a la productora de la película 'Biutiful', de Alejandro González Iñárritu, permitiendo que adecuaran un espacio para el rodaje colocando falsos ataúdes en los nichos, lo que provocó un 'shock' en las demandantes cuando fueron a visitar la tumba de su padre.
Según explicó el abogado de la familia, Francesc García, las mujeres acudieron el 10 de diciembre de 2008 a visitar las exequias de su padre, como hacían con asiduidad, cuando encontraron nichos con los cristales rotos, otros con los vidrios pintados de blanco y algunos ataúdes abiertos en el lugar, hecho que les causó 'gran impresión'. 'Todavía hoy están recibiendo tratamiento psiquiátrico', expuso el letrado, que insistió en la 'devastación' que había sufrido el lugar que visitaban con frecuencia.
Según García Fajardo, Cementiris de Barcelona responsabilizó a la productora de los daños sufridos por el cementerio y la obligó a restaurar el camposanto tras el rodaje de 'Biutiful', mientras envió unas palabras de disculpas a la demandantes.
Según García Fajardo, Cementiris de Barcelona responsabilizó a la productora de los daños sufridos por el cementerio y la obligó a restaurar el camposanto tras el rodaje de 'Biutiful', mientras envió unas palabras de disculpas a la demandantes.
