Más de 1.500 profesionales analizan en un congreso en Madrid las consecuencias de la crisis

Los sociólogos advierten del peligro de un estallido social

Protesta de los 'indignados' en la Puerta del Sol de Madrid. (Foto: ARCHIVO)
Los sociólogos advirtieron ayer de que si no somos capaces de cambiar el rumbo de España, si las cosas no mejoran y se enderezan, se puede llegar a situaciones graves de violencia, como las que se han vivido en otros países en los que se han producido enfrentamientos callejeros y revueltas. Estas son algunas de las consideraciones que se escucharán en el XI Congreso Español de Sociología, que se desarrolla desde ayer y hasta mañana en la Universidad Complutense de Madrid, donde más de 1.500 sociólogos analizarán las consecuencias sociales de la crisis y harán un diagnóstico de la sociedad española.
Pero en la mañana de ayer, los convocantes del Congreso ya avanzaron que nos encontramos en el momento más deteriorado de la convivencia, de la sociedad y del marco institucional español, un momento 'grave y de mucha incertidumbre'. Así lo planteó la presidenta de la Federación Española de Sociología, Teresa González de la Fe; el decano de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense, Heriberto Cairo, y la catedrática de la Universidad Autónoma de Barcelona Marina Subirats.

Y hemos llegado a esta situación, según el catedrático de Sociología Emilio Lamo de Espinosa, porque se nos han acumulado cuatro crisis sucesivas en el tiempo: una crisis de Estado e institucional, otra económica, una tercera política, de liderazgo, y la cuarta social. El pensamiento económico que ha predominado en los últimos años ha favorecido al avance de una nueva clase social a nivel mundial que está detrás de muchos de los elementos de la crisis actual, según Marina Subirats.


PRESIONES INTERNACIONALES

Las presiones internacionales ejercidas por algunos grupos, producto de la globalización, están dividiendo el mundo entre superricos y superpobres, que son la mayoría, y están haciendo disminuir las clases medias y, con ello, la sociedad del Estado del bienestar al que habíamos llegado. La catedrática está convencida de que la sociedad española, por sí sola, no hubiera llegado a estos extremos y la anima a que reaccione porque 'es necesario'. ¿Cómo debe hacerlo? La respuesta es clara: aunando esfuerzos.

Se han formado muchos grupos como respuesta a la crisis, pero estos movimientos sociales tienen que llegar a pactos entre sí a nivel nacional e internacional para hacer frente y neutralizar a esas clases sociales que han nacido con la globalización, a los que los políticos 'no son capaces de responder', según los sociólogos. De esta forma se reequilibraría una sociedad que se ha inclinado excesivamente hacia el lado de los poderosos, de los que están acaparando la riqueza del mundo y que nos están llevando a un 'desastre colectivo'.

Esos movimientos sociales tendrán que tener objetivos comunes claros porque 'para poder actuar no basta con protestar, sino que hay que actuar cambiando una serie de mecanismos', que se traduzcan en cambios, al menos en el marco europeo, en la política y en la legislación para el desarrollo del Estado de bienestar.

De no llegar a alcanzarse ese 'gran pacto', se puede romper la cohesión social y eso lo deben de tener muy en cuenta los políticos, desprestigiados ante la sociedad, según Teresa González.

Te puede interesar
Más en Sociedad