El Consejo de Administración de Radio Televisión Madrid acordó reducir un 34% su presupuesto para el 2013 con respecto al año anterior y propuso dejar la plantilla del ente público en 300 trabajadores.
De esta forma, y tras finalizar el pasado viernes el periodo de consultas con los sindicatos, el ente público madrileño propuso finalmente una última reducción del número de despedidos de 60 personas, de modo que la plantilla final quede fijada en 300 trabajadores, lo que implica el despido de 860 personas. La propuesta de RTVM contempla 57 trabajadores para el ente público, 181 para Televisión Autonomía Madrid y 62 para Radio Autonomía Madrid. En su oferta inicial, la propuesta era de 925 trabajadores despedidos.
Fuentes sindicales y del Comité de Empresa del ente autonómico destacaron ayer que el plan aprobado contó con el voto en contra de los consejeros de la oposición y que la empresa se negó a aceptar ninguna de las propuestas planteadas inicialmente de recolocación de unas 50 personas en la Comunidad o de prejubilaciones a partir de los 59 años, 'que no significaban coste alguno para la empresa'.
Para el Comité de Empresa 'está claro que este no es un ERE ocasionado por motivos económicos sino que lo es por cuestiones políticas', valorando la reducción de 60 en el número de despidos como prevista de antemano y anunciada como un intento 'de lavar la imagen ante la opinión pública'.
El Consejo de Administración acordó además unos gastos de explotación para 2013 de 84,51 millones de euros, lo que significa una reducción del 34% con respecto a la cifra del ejercicio del 2012. Los ingresos de explotación se fijan en 85,98 millones, de los que 70,98 millones proceden del contrato-programa con la Comunidad de Madrid y 15 millones por publicidad y otros ingresos comerciales.
Fuentes sindicales y del Comité de Empresa del ente autonómico destacaron ayer que el plan aprobado contó con el voto en contra de los consejeros de la oposición y que la empresa se negó a aceptar ninguna de las propuestas planteadas inicialmente de recolocación de unas 50 personas en la Comunidad o de prejubilaciones a partir de los 59 años, 'que no significaban coste alguno para la empresa'.
Para el Comité de Empresa 'está claro que este no es un ERE ocasionado por motivos económicos sino que lo es por cuestiones políticas', valorando la reducción de 60 en el número de despidos como prevista de antemano y anunciada como un intento 'de lavar la imagen ante la opinión pública'.
El Consejo de Administración acordó además unos gastos de explotación para 2013 de 84,51 millones de euros, lo que significa una reducción del 34% con respecto a la cifra del ejercicio del 2012. Los ingresos de explotación se fijan en 85,98 millones, de los que 70,98 millones proceden del contrato-programa con la Comunidad de Madrid y 15 millones por publicidad y otros ingresos comerciales.
