El estramonio, conocido en Galicia como figuiera do demo o figuiera tola, y cuyo nombre científico es Datura stramonium, es una planta herbácea anual de porte robusto, de la familia de las Solanáceas, posiblemente originaria de la América tropical y difundida por casi todo el mundo. Presenta una raíz larga y blanquecina, con numerosas raicillas secundarias. Su tallo es cilíndrico, hueco, muy ramificado y de color verde amarillento. Sus hojas son alternas, grandes, ovaladas, dentadas y de color verde oscuro, más pálidas por la parte inferior que por la superior. En las axilas de las ramificaciones brotan las flores solitarias, que son grandes y con forma de trompeta, de color blanco o ligeramente violáceo. Florece desde finales de la primavera hasta el otoño. El fruto es una cápsula leñosa de color verde, ovoide y con numerosas espinas, que encierra , en sus cuatro valvas, semillas en forma de riñón y negras. Toda la planta desprende un olor fétido característico, motivo por el cual recibe también el nombre de hierba hedionda. Posiblemente esta es la razón por la cual no es ingerida por los herbívoros. Todas sus partes son altamente venenosas, especialmente sus semillas. Crece en terrenos incultos, estercoleros, a lo largo de los bordes de caminos y, frecuentemente, las podemos encontrar en los maizales.
Es una especie usada desde la antigüedad a causa de sus propiedades medicinales y alucinógenas. En el siglo I, Dioscórides, en su obra “De materia medica”, habla ya de su toxicidad y de sus propiedades psicoactivas y se sabe que era usada tanto por los griegos, en la fiestas en honor del dios Dionisio, como por los romanos, en las famosas fiestas del dios Baco, los Bacanales.
Brujas, chamanes y hechiceros la usaron para provocar delirios, en general desagradables y que frecuentemente comportaban graves efectos adversos como convulsiones, insuficiencia respiratoria y colapsos vasculares e incluso la muerte. Todas estas consecuencias tan negativas y perjudiciales han desaconsejado siempre su uso y su venta.
No obstante, se cultiva en grandes extensiones con fines medicinales, para su uso en polvo, tintura o cataplasmas. Para ello se recogen tanto sus hojas como sus semillas. Las hojas deben ser cortadas al amanecer, al principio de la floración, para proceder a su secado rápido en lugares ventilados o en un horno templado. Las semillas deben recogerse a principios de otoño, antes de que las cápsulas se abran espontáneamente, poniéndolas a secar al sol. Posteriormente deben conservarse en lugares oscuros y sin humedad. Ambas contienen sustancias con efectos antiespasmódicos, sedantes, antineurálgicos y narcóticos, que además de calmar los dolores, disminuyen las secreciones glandulares y dilatan los bronquios. Fueron utilizadas para el tratamiento de los fuertes catarros bronquiales, la tos ferina, la laringitis crónica y el asma. También en casos de cólicos hepáticos o renales, cistitis y dolores abdominales, así como en dolores del área genital femenina. Se aplicó externamente en cataplasmas para combatir los dolores reumáticos. En todo caso, es necesario tener presente que por su alto contenido en alcaloides, altamente venenosos, su uso farmacológico queda única y exclusivamente reservado a los médicos. La ingestión directa tanto de hojas como de semillas puede ser mortal.
Hay otras especies como el Datura fastuosa y el Datura metel que se cultivan con fines terapéuticos, y están incluidos, respectivamente, en la farmacopea de la India y en la China.
Como curiosidad, anotar que en Estados Unidos el estramonio es conocida también como “Jimsonweed” o “Jamestown weed”, la hierba de Jamestown, debido a que en 1676 un grupo de soldados ingleses consumieron esta hierba en esa ciudad de Virginia, sufriendo una gravesima intoxicación masiva.