El buque recaló en Vigo antes de ir a Mónaco a buscar un comprador interesado en poner al menos 100 millones
Uno de los barcos más raros, lujosos (y fracasados) ha estado amarrado desde el fin de semana en un muelle también extraño para una embarcación privada, el Transversal, frente a la Delegación de la Xunta. Se trata del “PJ World Explorer”, un yate de 81,5 metros de eslora y 14,5 metros de manga, que cuenta con siete niveles para alojar a 16 pasajeros y sus 27 tripulantes y un helipuerto. Rolls Royce Marine y el célebre astillero Palmer Johnson, especializado en la construcción de embarcaciones de lujo, trabajaron en el desarrollo y la creación de un buque que iba a destacar por todos sus servicios y por su ecológico motor híbrido. ¿Qué podría salir mal? Todo. Está a la venta por algo más de 100 millones de euros… acabado como estaba previsto. Porque ni siquiera está finalizado ni pintado. Su propietario falleció antes de la entrega y el “PJ World Explorer”, obra del estudio de diseñadores de yates italiano Nivolari Lenard, se quedó al pairo. Su creador se propuso desarrollar una embarcación capaz de navegar en todas las aguas del planeta, y que incluyera sistemas de seguridad de última generación y comodidades de lujo dignas de una mansión en tierra firme. Como suite principal, dispone de un apartamento de tres niveles con vista panorámica de 360 grados, vestidores, baños, jacuzzi, oficina y una sala de estar privada. El área de recreación para los invitados ofrece salones con amplias vistas, comedor, bar y cine. El yate también dispone de un helipuerto con una generosa plataforma que se puede replegar hacia el interior y un submarino de 6 plazas.
