Una nueva moda recorre Madrid, y se extiende de bistrós chic como Murillo Café -cerca del Museo del Prado- hasta restaurantes elegantes como Picalagartos, en plena Gran Vía. Aunque recién llegada, la tendencia se está volviendo un imprescindible en aperitivos y afterworks: la media copa. Sí, es exactamente como suena: una bebida servida en copa de vino, con sólo 3cl de ron, whisky o ginebra y combinado con un mixer, hielo y una rodaja de limón, naranja o lima.
El resultado es el medio gin tonic, el medio negroni o el medio whisky con ginger ale. Todos ellos cócteles que cuenta con menos alcohol que un combinado tradicional, pero el mismo sabor, y que está ganando importancia como alternativa a la caña, el vermut o el vino. Para sus entusiastas, se trata de una opción con el mismo alcohol que una cerveza, pero más sofisticada y colorida. Más classy, dirían algunos... pero ¿y fuera de los ambientes de la capital?
La pregunta que nos hacemos desde aquí es: ¿llegará esta nueva moda en Ourense? ¿Habrá algún visionario de Vinos que lo incluya en su carta? ¿O no hará falta, porque por los 4 o 5 euros que te cuesta allí la tontería aquí te da para una caña bien tirada y te sobra para un pincho de tortilla o unas bravas? Sobre gustos, ya saben.
