Se culmina así la actualización y reforma de la normativa más importante de la institución académica
Este pasado sábado, 23 de febrero de 2019, entraron en vigor los nuevos Estatutos de la Universidad de Vigo, los cuartos de la institución académica. Se culmina así un proceso que se prolongó durante varios años y que supone la adecuación, actualización y reforma de la principal normativa con la que se rige la vida universitaria.
Los nuevos Estatutos se aprobaron por mayoría absoluta del Claustro, el 24 de enero de 2018 y, posteriormente, fueron remitidos a la Xunta de Galicia, donde se sometieron al correspondiente control de legalidad. Sin tener que realizar apenas cambios en el texto enviado, el nuevo Claustro, salido de las urnas el pasado mes de abril, le dio el visto bueno definitivo por asentimiento al nuevo texto en octubre de 2018. En ese momento, quedaba solamente pendiente su aprobación definitiva por el Consello da Xunta, que tuvo lugar el pasado 24 de enero, y la publicación en el Diario Oficial de Galicia, hecho que se produjo este pasado viernes 22 de febrero.
La reforma de los Estatutos se puso en marcha en diciembre de 2014 y corrió a cargo de una comisión presidida por el entonces rector, Salustiano Mato, e integrada por 17 miembros de todos los ámbitos académicos. El resultado final de su trabajo fue un texto de 118 artículos, frente a los 164 del anterior texto, estructurado en seis títulos: uno preliminar, dedicado a las disposiciones generales; el Título 1, centrado en Estructura, goberno e administración da Universidade; el Título II, Comunidade universitaria; Título III, Creación e transmisión de coñecemento; Título IV, Réxime económico e financeiro da Universidade; y un Título V, en el que se ahonda en los diferentes aspectos relacionados con la Reforma de los Estatutos.
Entre las grandes novedades del anteproyecto de Estatutos con respecto a los anteriores destacan los cambios en la composición del Claustro, máximo órgano de representación y de control de la comunidad universitaria, que estará compuesto por un mínimo de 250 miembros y un máximo de 265 con la siguiente distribución: 51% de profesorado doctor con vinculación permanente (PDI-A); 9% del resto del personal docente e investigador (PDI-B); 25% de alumnado, en el anterior era un 30%, y 15% de personal de administración y servicios (PAS), un 5% más que en el texto previo.
En los nuevos Estatutos destaca también la creación, por primera vez en la historia de la UVigo, del Consejo de Estudiantes (Ceuvi), que se convertirá en el máximo órgano de coordinación de la representación estudiantil, y ciertos cambios en el Tribunal de Garantías, que pasa a ser sustituido por la figura del Valedor/a Universitario, un órgano que cumplirá las mismas funciones, pero no como órgano colegiado, sino unipersonal, si bien contará con la ayuda de una comisión de asesoramiento.
