Evaluar, a través de marcadores biológicos como el cortisol las alteraciones en los niveles de estrés que pueden resultar del uso de la realidad virtual para desarrollar un programa de actividad física. Ese es el objetivo del estudio realizado en las últimas semanas por investigadores del grupo HealthyFit, de la Facultad de Ciencias de la Educación y el Deporte, con la colaboración de estudiantes, profesores y personal de administración y servicios del campus.
En las últimas semanas, más de 30 miembros de la comunidad universitaria participaron en un estudio respondiento a un perfil de diferentes edades y estados para que no hubieran utilizado previamente un dispositivo de realidad virtual. Los participantes debieron realizar, como señala el investigador Pablo Campo, "unha sesión de exergaming", que implica el desarrollo de la actividad física, para poder conocer, mediante el análisis de la saliva, sus niveles. de cortisol, que es una hormona marcadora de estrés, midiéndola antes y después de realizar la prueba, según explica el responsable del grupo HealthyFit, José María Cancela.
