Una década después de que los funcionarios judiciales se trasladasen al nuevo edificio, el equipo de gobierno de O Barco de Valdeorras apuesta por recuperar la antigua sede de los Juzgados para la Policía Local. El anuncio lo hizo ayer el alcalde, Alfredo García Rodríguez, durante la presentación del presupuesto de 2020, cuyo suma total es de 9.840.618 euros.
Los técnicos municipales manejan un proyecto de 225.000 euros. Contempla el montaje de un ascensor que resuelva definitivamente las barreras arquitectónicas del edificio, que en su día obligaron a los jueces a tomar declaración en la calle a personas con problemas de movilidad. Los planes municipales para el año próximo contemplan una primera fase, que también incluirá la recuperación del sótano, el bajo y la primera planta. Además, prevé renovar las ventanas y mejorar su eficiencia energética, sustituyendo las ventanas y construyendo cámaras aislantes.
Las dos plantas serán asignadas a la Policía Local, dejando varios despachos libres que podrán ocupar los agentes de la Oficina de Extranjería y Documentación, y que reclama el Concello.
La recuperación de este edificio, ubicado en el centro de la villa barquense, da respuesta a una vieja demanda vecinal, tras ver como con el paso del tiempo se fueron desprendiendo partes de una construcción que únicamente usaba algún transeúnte para dormir.
Otro proyecto que pretende impulsar el equipo de gobierno el año próximo afecta a la torre de O Castro, declarada BIC (Bien de Interés Cultural) en 1970 y cuyos restos datan de los siglos XV, XVI y XVIII. Una vez consolidada la muralla interior, obra que formó parte de la primera fase, el alcalde anunció la redacción del proyecto de una senda que bordeará la construcción y cuya ejecución fue presupuestada en 220.000 euros, así como la renovación de las conducciones y servicios, valorada en 80.000 euros.
El parque empresarial de A Raña también será objeto de reformas. Después de varias reuniones con la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil, Alfredo García informó que el suelo industrial del polígono podría ser ampliado al aprovechar el suelo urbano anexo al recinto. Su conversión en suelo industrial por el Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) permitirá asignar a las empresas aproximadamente otros 100.000 metros cuadrados y no agotar las parcelas.
Dejando a un lado los proyectos que no aparecen en el presupuesto, este destina al capítulo inversor 634.451 euros, si bien, esta cifra no incluye otras actuaciones plurianuales que el Concello acomete con cargo al superávit, como el remate de la escuela infantil (168.580 euros), la renovación del alumbrado (199.923) y la mejora energética del Teatro Lauro Olmo (145.000). El alcalde estimó el total de la inversión en 2,55 millones.
