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La avispilla del castaño estará controlada antes de cuatro años

photo_camera Técnicos de la empresa pública Seaga y del Servizo de Montes, de la Xunta, se desplazaron este miércoles hasta los sotos de Alixo en Valdeorras para realizar una suelta de Torymus sinensis.
La Consellería de Medio Rural llevó a cabo la suelta de Torymus sinensis en sotos de O Barco

Técnicos de la Consellería do Medio Rural y de la empresa pública Seaga se desplazaron ayer hasta Alixo (O Barco de Valdeorras) para realizar una suelta de ejemplares de Torymus sinensis destinados a combatir a la avispilla del castaño (Dryocosmus kuriphilus). En toda Galicia se soltarán más de 1,2 millones de parasitoides, según apuntó Víctor Martínez, del Servizo de Montes de Ourense, dependiente de la Xunta, en una actuación que tendrá un coste de 1,7 millones de euros.

El técnico de Montes explicó que las sueltas comenzaron a realizarse en 2015, al año siguiente de detectarse la presencia de la avispilla, un insecto que comenzó su expansión desde Japón y que puede reducir a la mitad, o incluso acabar con el 100 % de la producción de castaña.

Según las estimaciones realizadas, en un plazo de 2 a 4 años, la población de Dryocosmus kuriphilus podría estar controlada. “Nalgunhas zonas, os resultados son moi bos”, comentó Martínez. A su lado, María Meilán, técnico de Seaga, confirmó: “Hai zonas onde hai poboacións de Torymus asentadas”.

Los técnicos de Medio Rural afirman que en algunas zonas de Galicia la presencia del insecto ya está controlada

La lucha biológica contra el insecto invasor se desarrolla en dos fases. En la primera se suelta su parasitoide en 5.716 puntos diferentes, que dividen el territorio gallego en una malla de cuadrículas con 16 kilómetros de lado.

Posteriormente, a la llegada del otoño se recogen bugallas para verificar si en su interior sigue el Torymus sinensis, pues este pone en su interior las larvas que acaban con los huevos de las avispas. En la revisión de 2021, se recuperaron ejemplares de este parasitoide en 523 de los 569 puntos analizados, lo que supone el 92% del total, casi el quíntuple de los encontrados en 2020.

El ataque de la avispilla no afecta a todos los sotos por igual, pues depende de la variedad de castaña y del terreno. “As soltas empezan desde que brotan os castiñeiros. Espérase a que salgan as bugallas e facemos as soltas”, explicó María Meilán.

La Consellería do Medio Rural considera un sector estratégico la producción y exportacion de castaña, que sitúa a Galicia a la cabeza del ránking nacional, pues aglutina a más de la mitad de la producción y un porcentaje similar de las empresas comercializadoras del fruto.

La superficie de los sotos gallegos supera las 49.000 hectáreas, estando localizadas principalmente en el este de las provincias de Lugo y Ourense, con una producción  media de aproximadamente 20 millones de kilos en los últimos años. Su valor económico ronda los 20 millones de euros pagados a los productores y los 50 en productos transformados.

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