Pretende detectar aquellos ejemplares situados en la vía pública que se encuentran en mal estado
Un catálogo, que comenzó a elaborar la Concellaría de Medio Ambiente, Sanidade e Educación, incluirá datos de todos los árboles de la villa de O Barco. Durante los próximos meses, los barquenses podrán ver a una becaria contratada por el Concello sacando fotos y tomando notas de todos y cada uno de los ejemplares que crecen en las vías públicas y áreas recreativas de la localidad. Una semana después de iniciados los trabajos, su lista ya contenía indicaciones de más de 300.
"Era un compromiso que tiñamos e como este ano temos unha becaria podemos facelo. Comezamos agora porque antes estivo coa campaña do reciclaxe de residuos sólidos", dijo el concejal de Medio Ambiente, Aurentino Alonso Araujo.
La trabajadora municipal repartió la villa barquense en varias zonas y las recorre, una a una, recogiendo detalles y fotografiando los árboles que se encuentra. Cada uno de ellos contará con su propia ficha, salvo aquellos que formen parte de un grupos, los cuales serán registrados conjuntamente, según dijo el concejal.
Esta tarea es consecuencia del acuerdo que en julio de 2012 adoptó la Corporación municipal que preside el socialista Alfredo García Rodríguez. En aquella sesión, los concejales aprobaron por unanimidad una moción popular, referida a la elaboración del citado inventario. Fue presentada a raíz de los continuos desperfectos causados por la caída de árboles en los bienes públicos. A finales de 2011, un chopo de grandes dimensiones destrozó un tramo de la barandilla de la playa fluvial del río Sil, en el Paseo do Malecón. Pocas semanas después, otro ejemplar cayó sobre el parque biosaludable de esta misma área recreativa, destrozando la valla de madera del cierre y varios aparatos. Dos años antes, en 2010, uno de los álamos blancos que crecen en la orilla del arroyo Mariñán, en Calabagueiros, cayó sobre el graderío del estadio municipal, causando importantes daños. No fue el último. El pasado mes de febrero de 2014 otro de estos árboles vencía sobre la cubierta, ocasionando diversos desperfectos sobre esa misma cubierta del campo de fútbol. Este problema no se volverá a dar. La autorización de la tala que otorgó la Confederación Hidrográfica Miño-Sil desapareció la amenaza que, en forma de árbol, se cernía sobre el público que acude a ver pruebas deportivas.
En todo caso, los destrozos fueron recogidos en la moción que el grupo popular llevó a aquel pleno, de hace más de dos años, en el que todos los concejales dieron su visto bueno al acuerdo: "Con la participación de todos los grupos políticos, a través de la Comisión de Medio Ambiente, el Concello de O Barco se compromete a la elaboración de un inventario municipal del arbolado urbano". Ante la demora en el cumplimiento del acuerdo plenario, la oposición que encabeza Moisés Blanco Paradelo insistió varias veces en su ejecución.
El catálogo no solo determinará los árboles en mal estado. El concejal socialista Aurentino Alonso explicó que también recogerá aquellos que merecen medidas especiales de protección y puso de ejemplo los que crecen en la Praza de Andrés de Prada.
