Los trabajos de mejora acometidos en el puente que comunica O Barco de Valdeorras con Viloira obligaron a cerrar alternativamente al tráfico los dos carriles de la infraestructura, provocando pequeñas retenciones a los vehículos que utilizan esta infraestructura para superar el río Sil.
Las obras consistieron en la renovación de las juntas salvacantos y fueron acometidas por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana después de un buen número de quejas de usuarios por el mal estado en que se encontraban las piezas reemplazadas. Los trabajos comenzaron el lunes pasado y los operarios procedían ayer a dar los últimos retoques a las nuevas juntas.
Estas deficiencias existían en un puente que no solo utilizan los conductores barquenses. Sobre él también circula buena parte del tráfico pesado del sector de la pizarra, cuando se desplaza hacia la carretera N-120, desde la N-536.
Hace poco más de un año, en septiembre de 2019, esta misma infraestructura fue objeto de otra mejora, esta iniciada debido al exceso de vibración que había detectado la Policía Local y que provocó la separación de una albardilla (pieza prefabricada situada a ambos lados del puente). En esta ocasión, los trabajadores de la red de Carreteras del Estado colocaron grapas entre la albardilla y el resto de la estructura para resolver una deficiencia que no suponía ningún peligro para los usuarios.
