La caída de grandes rocas sobre la carretera que comunica O Barco con el núcleo de Castro obligó a la Policía Local a cortar el vial.
Un vecino dio la voz de alarma a las 13,30 horas de ayer, desplazándose inmediatamente hasta este punto, situado a escasos 500 metros de la villa barquense, el inspector y agentes de la Policía Local, así como los trabajadores del Grupo de Emerxencias Supramunicipal, que procedieron a cerrar al tráfico en un punto muy próximo a la carretera N-536, lo que hizo temer que algún pedrusco cayese sobre ella.
El corte de la carretera obliga a los vecinos de los núcleos de Castro y Vilariño a rodear por la carretera que comunica Viloira con Soulecín, lo que les supone unos 500 metros más de recorrido.
A última hora de la tarde de ayer la carretera continuaba cerrada. Esta medida de precaución continuará en tanto no exista la seguridad de que los desprendimientos finalizaron.
El corte de la carretera obliga a los vecinos de los núcleos de Castro y Vilariño a rodear por la carretera que comunica Viloira con Soulecín, lo que les supone unos 500 metros más de recorrido.
A última hora de la tarde de ayer la carretera continuaba cerrada. Esta medida de precaución continuará en tanto no exista la seguridad de que los desprendimientos finalizaron.