VIVIENDA

El casco antiguo de O Barco revive como zona residencial

Obras de rehabilitación en cuatro de las viviendas del casco antiguo barquense.
photo_camera Obras de rehabilitación en cuatro de las viviendas del casco antiguo barquense.
La rehabilitación de cinco viviendas en las calles Real y San Roque cambia la imagen del barrio

En las últimas semanas, los propietarios de cinco casas del casco antiguo de O Barco acometieron su recuperación. Se suman a las rehabilitaciones realizadas en los últimos años, consiguiendo variar considerablemente la imagen de las calles Real y San Roque, dos arterias que forman parte del trazado del Camiño de Inverno.

Los proyectos fueron acometidos por particulares, lo cual lleva a aventurar que su destino será el de servir como viviendas, pues en este barrio barquense hace muchos años que no abre ningún negocio nuevo. Si hace una década, en esta zona de la villa trabajaban 22 negocios, en la actualidad apenas son cuatro los que puede contar la empresaria Pilar Pérez Bustillo.

El alcalde, Alfredo García Rodríguez, afirmó que la iniciativa vecinal va encaminada a hacer del casco viejo "una zona residencial". El regidor felicita a los vecinos por su iniciativa, pues "va a hacer que en poco tiempo, el barrio esté rehabilitado".

También Pilar Pérez aplaude la respuesta de los propietarios de las casas. "¡Es genial! ¡Está quedando chulísimo!", exclamó. Esta vecina apuntó un detalle curioso, relacionado con la recuperación de las viviendas, pues explica que los propietarios apuestan por las casas construidas sobre la orilla del río Sil. Las viviendas de enfrente no despiertan tanto interés. "Lo que quieren son las vistas del río", dijo.

La calificación de Área de Rehabilitación Integral (ARI), que conceden el Ministerio de Fomento y la Xunta, y que vecinos del barrio y Concello intentaron conseguir hace cinco años, no prosperó. En caso de obtenerla, los propietarios de viviendas podrían acceder a unas ayudas que podrían ser de hasta 11.000 y 30.000 euros en rehabilitaciones y construcción de casas, respectivamente. "Nunca se pudo conseguir el ARI. Necesitas un compromiso de los vecinos y no lo hubo", explicó el alcalde. Pese a ello, Alfredo García aplaudió la iniciativa vecinal: "La rehabilitación funciona bien".

La pasarela restó clientes a los negocios
La rehabilitación de viviendas comenzó a cambiar la imagen del casco viejo. Desafortunadamente, la actividad empresarial parece huir del barrio. Pilar Pérez alude a la construcción, hace 10 años, de la pasarela peatonal que comunica el barrio barquense con Viloira como una de las posibles causas.  "La gente acorta por ahí. Antes, iba a la feria por el puente y echaba un vistazo a los negocios", dijo. Argumentó otras dos razones del cierre de negocios. Por un lado la eliminación del aparcamiento, que permitía detenerse a quienes circulaban en coche, pero también el envejecimiento de la población, pues muchos propietarios de locales se jubilaron.
En todo caso, la empresaria afirma estar encantada con la recuperación de las viviendas. También el alcalde, Alfredo García, quien considera una prioridad para este año, recuperar la Praza das Airas. 

Te puede interesar