VALDEORRAS

La castaña turca y de China amenaza al sector valdeorrés

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photo_camera Castaños marcados para ser tratados contra la enfermedad del "chancro", en O Barco.

Los productores andaluces y extremeños también se benefician de la baja producción comarcal 

El año 2017 no fue bueno para el sector de la castaña, tanto que productores y distribuidores temen que su lugar pueda ser ocupado por el fruto producido en países como China o Turquía, e incluso en otras comunidades autónomas, como Extremadura o Andalucía. Las heladas y la sequía castigaron reduciendo a prácticamente la mitad una producción que un año normal oscila en torno a los 20 millones de kilos, según las estimaciones de la Consellería de Medio Rural, y un 60 % de este volumen corresponden a la provincia, tal y como indican los cálculos del sector. Los efectos de las heladas no solo fueron palpables en la cantidad del fruto, también se hicieron notar en la calidad. Las castañas fueron pequeñas y con mucho daño interno en los sotos del oriente provincial.

El problema es grave y preocupa seriamente a los empresarios. "El año pasado fue un desastre. La castaña gallega tiene prestigio, pero el mercado tiene un tamaño y un consumo. Cuando se pierde la confianza en un suministrador, se busca en el mercado internacional", explicó Francisco Barredo, presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Productos Agrosilvestres de Galicia (Proagrosilva).

El empresario barquense también añadió al problema de unas condiciones meteorológicas adversas la aparición de la avispilla del castaño (Dryocosmus kuriphilus), un insecto que echó abajo la producción de castaña en Italia, cuando era uno de los mayores exportadores. En estos momentos, el país transalpino se recupera de la plaga y ya se encuentra al 80 % de su capacidad, recuperando un mercado en el que su fruto fue sustituido por el gallego, en buena medida.

"Italia está remontando la crisis de la avispilla y nosotros la estamos empezando", comentó Francisco Barredo. El industrial de O Barco echa en falta un mayor apoyo del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Su autorización para la suelta del insecto que combate la plaga, el Torymus sinensis, es obligada. Sin ese visto bueno, el apoyo que está prestando Medio Rural no basta para superar el problema. "Tenemos todo el apoyo de la Consellería pero falta el permiso del Gobierno central. Necesitamos un plan de acción", añadió.

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