Los polémicos árboles que crecen en las inmediaciones del estadio municipal de Calabagueiros desaparecerán en otoño.
Lo anunció el Concello de O Barco, que gobierna Alfredo García Rodríguez, después de que la Confederación Hidrográfica Miño-Sil autorizase su tala. La solicitud partió de la Concejalía de Deportes, Parques e Xardíns, que dirige Julio Fernández Arias, después de que uno de los ejemplares cayese sobre la cubierta del campo de fútbol, a finales de febrero.
Son 39 los álamos blancos de la calle Río Mariñán que talará el Concello. Los propios técnicos municipales seleccionaron los árboles en una inspección que detectó la presencia de insectos y enfermedades. También encontró ejemplares de gran envergadura y con poca sujeción de las raíces. "Algunas de ellas sobresalen del suelo y ya están afectando a la calzada de la calle", explicó el Concello.
La Confederación Hidrográfica concedió un plazo de un año para la retirada de los árboles. Sin embargo, los trabajos no comenzarán hasta otoño. "El proceso vegetativo de todos los ejemplares está iniciándose y no se aconseja la plantación de nuevos árboles en esta época del año. El Concello esperará al otoño para la tala y plantación de, al menos, el mismo número de árboles, pero de especie adecuada para la zona". Esta podría ser la acacia de bola, aunque aún falta por concretar.
