La Corporación ruesa aprobó la cuenta de 2018 sin el BNG

Las sillas de los ediles nacionalistas permanecieron vacías.
photo_camera Las sillas de los ediles nacionalistas permanecieron vacías.
La convocatoria matutina que PP y RUA justificaron en la urgencia fue criticada por la oposición

El equipo de gobierno formado por PP y RUA sacó adelante, con el apoyo del PSdeG-PSOE, la cuenta general de 2018. La aprobación llegó con el voto unánime de los asistentes al pleno, lo que no evitó las críticas de la oposición socialista y, posteriormente, del BNG, cuyo grupo no acudió a la sesión. Ambos se quejaron de la convocatoria en horario de mañana.

El alcalde popular, Álvaro Fernández López, justificó la convocatoria extraordinaria y urgente en la necesidad de tener aprobada la cuenta general de 2018 para acceder a ciertas subvenciones. "Es imprescindible para optar a ciertas subvenciones de este año. Ya hemos perdido algunas debido a la herencia del anterior equipo de gobierno", dijo el regidor, que aludió a la pérdida de ayudas para comprar material para la Biblioteca o de la Renta de Integración Social de Galicia (Risga). Además, aseguró que la citada cuenta fue elaborada en un "tiempo récord de seis meses" y añadió que el pleno fue fijado para las 11,00 horas de la mañana para posibilitar subir el documento a la plataforma de la Xunta en el mismo día.

"Entendo a urxencia, mais da igual celebralo ás once que ás oito da tarde. Así permitiría asistir a máis xente. Hai xente que ten difícil asistir", se quejó el portavoz del PSdeG-PSOE, Luis Fernández Gudiña.

Más crítico se mostró el grupo del BNG, que encabeza María González Albert. Justificó su ausencia en que "esta convocatoria só veu a sumarse a un xeito constante de facer do grupo de goberno liderado polo PP, que pretende imposibilitar, na medida do posíbel, toda fiscalización da labor de goberno", según recogió en una nota de prensa. Los nacionalistas afirmaron que la convocatoria de sesiones en horario laboral supone "unha mordaza constante para o acceso á información municipal por parte dos grupos".

El BNG consideró que la celebración de comisiones informativas en horario de mañana, que imposibilitan la asistencia de los demás grupos, es, "na práctica, un desprezo á metade da cidadanía de A Rúa, que está representada na Corporación por BNG e PSOE". Asimismo, se quejó de que el grupo de gobierno tomó decisiones polémicas de forma unilateral, como la subida del precio de la Festa del Codillo o el cambio de fecha del desfile de Entroido. El grupo nacionalista finalizó criticando la "falta de cultura democrática" de PP y RUA.

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