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El corte de la N-536 en León congestiona un vial de Rubiá

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photo_camera Señales provisionales adiverten del desvío por O Barco a los conductores que se dirigen a Puente.

Los conductores usan una sinuosa carretera para evitar 20 kilómetros extra del desvío por O Barco

En Rubiá se observa con preocupación el aumento del tráfico en la carretera local que comunica Quereño con Vilardesilva. El corte de la carretera N-536 entre las localidades leonesas Puente de Domingo Flórez y Salas de la Ribera desvía a muchos de sus usuarios por la estrecha, y con un sinfín de curvas, vía valdeorresa. No es la opción que recomendó el Ministerio de Fomento cuando anunció que el 2 de mayo comenzarían unos trabajos de consolidación de un talud que se prolongarían durante 20 días. La Administración central propuso acceder a la N-120 desde O Barco como itinerario alternativo para viajar hacia Ponferrada y al resto de la provincia de León. Pero su propuesta supone dar un rodeo de más de 30 kilómetros, que se quedan en apenas 10 para quienes eligen la opción de Rubiá.

"Aumentou o tráfico aínda que non é a vía adecuada. É estreita e con curvas. Deteriorase", explicó ayer el alcalde de Rubiá, Elías Rodríguez Núñez. Confirmó la titularidad municipal de la vía alternativa a la propuesta por Fomento y añadió que el vial está soportando bien el paso de los vehículos. "De momento, aguanta ben", explicó.

Nada más tener constancia del inicio de las obras en el tramo leonés de la N-536, el alcalde visitó la carretera de Vilar de Silva. Elías Rodríguez constató el aumento del tráfico, aunque también apreció que el incremento de vehículos es inferior al de 2015, año en el que la circulación de la carretera nacional fue cortada en el mismo punto. "Xa foi maior o aumento do tráfico. As primeiras veces, comenzáronse a meter por aquí. Agora, danse conta de que é máis seguro ir por O Barco", comentó.

En los accesos a O Barco desde la N-120 fueron colocadas señales provisionales anunciando de un desvío que provocó el enfado de varios alcaldes de la provincia vecina, que reclaman la mejora definitiva de la N-536. Además, el corte de la carretera puso en alerta al parque rues del Consorcio Provincial de Bomberos de Ourense, que debe atender las emergencias de los concellos leoneses situados en el tramo leonés próximo a Valdeorras.

El agua hunde un vial en Vilamartín

Las consecuencias de la fuerte tromba de agua registrada la semana pasada en Vilamartín y O Barco aún son patentes en estos concellos. Un tramo de una carretera local vilamartinesa, la que comunica los núcleos de Penouta y Arnado, se hundió a causa del agua que desciende por la ladera. Parte del firme fue arrastrado al tupir los arrastres las conducciones que deberían encauzar el líquido elemento. Sucedió a unos 100 metros de las cuevas de Penouta. Aquí, la mitad de la calzada aún permitía ayer el paso de vehículos. Sin embargo, el Concello decidió cerrar el vial al tráfico como medida de precaución. El alcalde, Enrique Álvarez Barreiro, no descartaba que las filtraciones pudieran seguir erosionando la tierra sobre la que fue asentada la pista, con el consiguiente riesgo de accidente.

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