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As Ermidas recupera brillo gracias a las visitas turísticas

Aldo Nicolai, Juan Navarro, Marcos Lema y Juan Carlos Espinosa, ante el santuario de As Ermidas.
photo_camera Aldo Nicolai, Juan Navarro, Marcos Lema y Juan Carlos Espinosa, ante el santuario de As Ermidas.

Desde el Entroido la llegada de grupos particulares se multiplicaron respecto al año 2018 

La llegada de visitantes al santuario de As Ermidas, construido en el siglo XVII, se disparó en los últimos meses. José Vega Martínez, el único guía voluntario de este templo de O Bolo y también presidente de la Cofradía de Nuestra Señora de As Ermidas, estimó en más de 3.000 las personas que visitaron este monumento valdeorrés, mayoritariamente después del Entroido. Este número es más del doble que el año pasado, por lo que los cálculos invitan a pensar que la cifra de 19.000 registros, contabilizados entre marzo y octubre de 2018, serán superados ampliamente. "Este año, es terrible el número de visitantes", comentó Vega Martínez, quien seguidamente apuntó que este crecimiento se produce a pesar de que "no se le da el auge que debería tener".

Las nacionalidades de quienes visitan el templo son muy variadas. Sin ir más lejos, cuatro periodistas recorrían ayer el santuario. Uno de ellos, Marcos Lema, con raíces en As Ermidas. "Mi abuela es de aquí. Estamos de ruta por Galicia; vinimos a pasar la Semana Santa". Con él llegó un vallisoletano, Juan Navarro, quien comentó que "no es frecuente encontrar en un pueblo pequeño un santuario como este. También llama la atención el viacrucis". El grupo lo completaron dos jóvenes llegados desde México. "El lugar me recordó el valle de México. Es tranquilo, bonito y con mucho encanto", dijjo Juan Carlos Espinosa. A su vez, Aldo Nicolai Yáñez comparó el estilo arquitectónico con el de la catedral de Morelia, en el estado de Michoacán, pues "el estilo también es barroco".

José Vega atribuyó el fuerte aumento del número de visitantes a la llegada de grupos llegados en viajes organizados por promotoras de viajes turístico. "Hay muchas empresas que organizan excursiones. En Pontevedra, hay una que prepara media decena todos los años", explicó. Algunas de estas visitas son preparadas con semanas de antelación, como la que un grupo de Marín solicitó para el próximo 9 de junio.

Los visitantes abandonan As Ermidas sorprendidos por el entorno del santuario, su fachada o el viacrucis de 14 capillas fechado en el siglo XVIII y barroco, uno de los tres de ese mismo estilo que pueden encontrarse en Europa, junto con los de Braga y Milán. El santuario fue declarado Bien de Interés Cultural en 2006.


Lista de espera en el antiguo seminario


Durante Semana Santa, los visitantes que se acerquen al santuario de As Ermidas encontrarán a gentes de todo el oriente provincial, pero también a casi medio centenar de personas que eligieron el silencio de este lugar "como un sitio donde vivir la Semana Santa de forma más espiritual". Lo explicó el sacerdote José Antonio Crespo. Llegan al municipio bolés desde muy distintos puntos de España, como Andalucía, Castilla y León o Cataluña, según apuntó este cura del santuario. Atendiendo al número de solicitantes podían ser más, pero la capacidad de las instalaciones del antiguo seminario es limitada y únicamente hay dormitorios para algo más de 40 personas, por lo que un buen número de ellos debe optar por una alternativa.

En todo caso, quienes llegan al núcleo de As Ermidas para disfrutar de unos días de recogimiento no deben abonar cantidad alguna. Los sacerdotes no cobran por la acogida, siendo su única exigencia la de adaptarse a las normas que rigen en el lugar. Es por ello que algunas personas acuden con alimentos típicos de sus lugares de origen, buscando compensar, en la medida de lo posible, la gratuidad de la estancia y también aportar su grano de arena a esta comunidad.

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