Una unión temporal de empresas, en la que participa Ayesa, redactará el proyecto de construcción del enlace entre las carreteras N-536 y N-120, también conocida como la circunvalación de O Barco. El anunció de la adjudicación provisional fue realizado ayer por el alcalde de O Barco, Alfredo García Rodríguez.
La mesa de contratación se reunió recientemente en la Jefatura de Carreteras de Galicia y, tras adjudicar inicialmente la consultoría y asistencia técnica del proyecto, remitirá el expediente a los servicios centrales del Ministerio de Fomento. Si no surgen imprevistos, los trabajos podrían comenzar en un plazo de tres meses, según los cálculos del regidor.
La redacción del proyecto fue adjudicada con una baja del 28 %, lo que sitúa el presupuesto de adjudicación en 1.048.024 euros.
El enlace entre las carreteras N-120 y N-536 es una obra que reclaman desde hace años los concellos de O Barco y Carballeda. Por esta infraestructura discurre la gran mayoría del tráfico del sector de la pizarra, con el consiguiente peligro que los numerosos vehículos pesados suponen para el resto de vehículos. El problema se agrava en la villa barquense, que los trailers deben cruzar para salir a la citada N-120 y abandonar la comarca.
La longitud de la futura carretera es de 5.7 kilómetros. La memoria inicial prevé la construcción de cinco viaductos, un paso superior y dos inferiores. El diseño de la calzada fue calculado para una velocidad de 80 kilómetros por hora y deberá analizar la mejora de la seguridad vial de los ciclistas.
La redacción del proyecto fue adjudicada con una baja del 28 %, lo que sitúa el presupuesto de adjudicación en 1.048.024 euros.
El enlace entre las carreteras N-120 y N-536 es una obra que reclaman desde hace años los concellos de O Barco y Carballeda. Por esta infraestructura discurre la gran mayoría del tráfico del sector de la pizarra, con el consiguiente peligro que los numerosos vehículos pesados suponen para el resto de vehículos. El problema se agrava en la villa barquense, que los trailers deben cruzar para salir a la citada N-120 y abandonar la comarca.
La longitud de la futura carretera es de 5.7 kilómetros. La memoria inicial prevé la construcción de cinco viaductos, un paso superior y dos inferiores. El diseño de la calzada fue calculado para una velocidad de 80 kilómetros por hora y deberá analizar la mejora de la seguridad vial de los ciclistas.
