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Los ganaderos de Valdeorras cargan contra su nuevo plan de saneamiento

Reses de una explotación de bovino del Macizo Central.
photo_camera Reses de una explotación de bovino del Macizo Central. (J.C.)

Las granjas del Macizo Central con alguna res enferma de tuberculosis sufrirán el vacío sanitario

El cambio de estatus sanitario del Macizo Central preocupa a los ganaderos. Al superar el uno por ciento las explotaciones que dieron positivo en la campaña de saneamiento de 2018 los animales reaccionantes son sacrificados directamente, practicándose el el vacío sanitario si el cultivo posterior confirma algún positivo.

"Desde Agromacen (Asociacion de Ganaderos del Macizo Central) creemos que es una medida discriminatoria, sobre todo si tenemos en cuenta que cada vez hay menos explotaciones y su número es inferior al de otras comarcas. De ahí que, si un par de ellas dan positivo, se supera el uno por ciento establecido", protestó su presidente, Pedro Rodríguez Parente.

Este colectivo plantea que la Administración debe considerar las características de cada comarca antes de tomar decisiones en materia de saneamiento ganadero, nunca "de forma transversal, aplicando normas genéricas".

Este colectivo también criticó el cambio del protocolo de actuación, sin que este fuese acompañado de modificaciones en las indemnizaciones, bien por sacrificio, o bien por lucro cesante si hay vacío sanitario obligatorio. Además, reclama más acciones preventivas en el control del trasiego de animales, práctica de pruebas a la fauna silvestre o aplicación de métodos más fiables, pues el actual "puede presentar falsos positivos", apuntó el presidente de Agromacen. Pedro Rodríguez recordó que ciertas publicaciones afirman que "cerca del 90 % de las reses dudosas que fueron sacrificadas o eran positivas".

Los ganaderos recuerdan que son sus explotaciones las que están en juego y que "las personas que tienen como modo de vida la ganadería son, en definitiva, los verdaderos cuidadores y soporte de un medio natural sostenible, fijan población y, sobre todo, evitan incendios".


La Xunta sigue el programa nacional


La Consellería do Medio Rural explicó que los animales que reaccionan a las pruebas son sacrificados, para luego tormar muestras en el matadero. Solo en el caso de que el diagnóstico microbiológico sea confirmado por un cultivo se valora el vacío sanitario de la explotación. Este departamento indicó que el criterio "é exactamente igual para toda a Comunidade Autónoma, especialmente para o caso de que a comarca teña prevalencia cero", tal y como establece el Programa Nacional de Erradicación de la tuberculosis bovina. "A Xunta cumpre estritamente a normativa de movemento de animais" y sus veterinarios "realizan cada ano a campaña de saneamento gandeiro, onde se controla esta e outras enfermidades".

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