Después de abandonar la presidencia de la Fegamp (Federación Galega de Municipios e Provincias), el alcalde de O Barco de Valdeorras dejará la dirección del Eixo Atlántico. Será el próximo mes de febrero, según anunció este lunes Alfredo García Rodríguez, que este martes se jubila como maestro, después de 44 años de servicio. "Me voy a dedicar exclusivamente a O Barco. Es lo que quiero", dijo.
El alcalde indicó que "la cuestión administrativa me come mucho tiempo, cada vez es más compleja. No puedo estar todo el día en el Concello. Quiero dedicarme a proyectos, hacer otras cosas", comentó. Entre ellas está la dirección municipal, pues García Rodríguez insistió en su propósito de continuar en la Alcaldía "toda la legislatura. Voy a cumplir el compromiso adquirido".
Su jubilación llevará aparejada el final de la dedicación exclusiva que gozaba en el Concello y que dejará de ingresar. Una vez se formalicen los trámites, será la segunda teniente de alcalde y concejala de Cultura e Educación, Margarida Pizcueta Barreiro, quien disfrute de una dedicación exclusiva. "Es una persona con unas características que le permitirán realizar esa labor", dijo el alcalde.
En referencia al primer teniente alcalde, Aurentino Alonso Araujo, el alcalde destacó la labor que está realizando dentro del grupo socialista de la Diputación provincial.
Una vez se formalice la dedicación exclusiva de la teniente de alcalde, se sumará a las parciales que en estos momentos rigen para las concejalías de Obras, Promoción Económica, Xardíns, Medio Rural y Abastecemento.
El alcalde explicó que estas dedicaciones parciales fueron aprobadas para los concejales que tienen alguna responsabilidad, tal y como sucedía cuando el PSOE accedió al grupo de gobierno.
En referencia a su labor en la presidencia del Eixo Atlántico, esta continuará hasta el próximo mes de febrero. Será el 7 de febrero y teniendo como escenario la ciudad portuguesa de Matosinhos, cuando la asamblea del organismo supranacional designe una nueva ejecutiva y el regidor barquense abandone la presidencia.
Si hasta ahora la dirección del Eixo Atlántico era repartida en turnos por los representantes portugueses y gallegos, una modificación de los estatutos varió el procedimiento, y deberá ser la propia asamblea la que vote a la ejecutiva que se pondrá al frente del citado organismo de entre las listas que se presenten.
En todo caso, el alcalde barquense seguirá formando parte de la ejecutiva a pesar de abandonar la presidencia del organismo. Seguirá trabajando como presidente, pero de la asamblea. Este órgano de gobierno se reúne una vez al año, por lo que sus exigencias serán muy diferentes a las que conlleva dirigir el Eixo, que obliga a acudir a todas las citas de las ejecutivas, según apuntó. "Quiero tiempo para dedicarlo a otros proyectos", insistió el regidor barquense.
