Investigan la presencia de osos en el oriente provincial

El paso de osos por el oriente provincial dejó de ser anecdótica. Los daños en colmenares y las huellas que dejaron en los últimos años lo atestiguan. Esta presencia es la que analiza el censo genético iniciado el 1 de septiembre y cuya fase de campo finalizó el 15 de diciembre. Sus resultados mostrarán cómo está repartida la población cantábrica de esta especie "en perigo de extinción", según informó la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda. Los investigadores delimitaron cuadrículas de 5 kilómetros de lado, que repartieron de la siguiente manera: Castilla y León, 239; Asturias, 202; Cantabria, 69; y Galicia, 43 (34 en Lugo y 9 en Ourense). El dibujo de estas últimas fue realizado por los agentes ambientales y el personal de los servicios de Patrimonio Natural de Lugo y Ourense, siempre bajo la supervisión de la Dirección Xeral de Patrimonio Natural. En la elaboración del censo colaboran las comunidades autónomas de la Cordillera Cantábrica: Asturias, Cantabria, Castilla y León, además de Galicia. También participa el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que dispone del asesoramiento del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) y la Universidad Autónoma de Barcelona. Recogida de muestras La recogida de muestras no invasivas (excremento y pelo) fue realizada entre el 1 de septiembre y el 15 de diciembre de 2020. Su estudio ofrecerá los perfiles genéticos individuales de cada ejemplar y permitirá una estimación de la población. Ya en una segunda fase, los investigadores analizarán el grado de conectividad de los núcleos de población de osos y su parentesco. "Só mediante estas técnicas de individualización xenética de exemplares poderase ter un coñecemento preciso sobre cales son as características determinantes da ocupación do territorio de todos os segmentos da poboación de oso pardo cantábrico (osos adultos reprodutores, osas adultas reprodutoras, osas con crías, osos subadultos divagantes, osas subadultas), e cales son realmente os patróns de ocupación do territorio dos individuos concretos pertencentes a eses segmentos poboacionais", explicó Medio Ambiente. A la espera de conocer los resultados del estudio, la presencia de osos en el oriente provincial, y especialmente en Valdeorras, es confirmada por la Fundación Oso Pardo, con sede en Asturias. Aquí, indican que hay informaciones y datos de 2020 que hablan de daños en colmenares y huellas en A Veiga, Casaio, Trevinca o Vilamartín de Valdeorras, sin olvidar el ejemplar joven grabado en el Parque Natural do Invernadeiro. Indican que "estos datos reflejan sin ninguna duda la presencia del oso en estas sierras ourensanas, aunque ya hace algunos años que se recogen datos esporádicos de presencia de osos en las sierras de Ourense, sobre todo en la comarca de Valdeorras y el entorno de Pena Trevinca, aunque también cerca de los montes del Invernadeiro", y añaden que "Courel como estas zonas de Ourense, Sanabria y Carballeda constituyen una vía de expansión muy interesante para la población cantábrica de oso pardo, con una gran importancia para la conservación global de la especie". “Hai apicultores que no colmear poñen cámaras" En la Asociación Valdeorresa de Apicultores muestran su preocupación ante los daños que causan los osos. "Hai apicultores que poñen cámaras para vixiar os colmeares", comentó su presidente, Armando Rodríguez. Recordó que en la última primavera destrozaron casi cien colmenas en A Veiga, Vilamartín y Carballeda. Estos daños son los que intenta evitar Medio Ambiente con la concesión de nuevas ayudas para proteger las colmenas con pastores eléctricos, con Rubiá y Vilamartín entre los concellos que tendrán preferencia. Vecinos y apicultores confirman la presencia de la especie en el oriente provincial. Francisco Fernández reside en Casaio (Carballeda de Valdeorras), un Concello que el plantígrado visitó en los dos últimos años. En 2019, estuvo presente en el hallazgo de huellas y excrementos por investigadores de Sputnik Labrego (del CSIC) y Apatigal (Asociación para a Defnesa do Patrimonio Galego) cuando estudiaban alvarizas, a 300 metros del pueblo. Unos días antes, los trabajadores de una pizarrera habían encontrado huellas de oso en el polvo de la pizarra. Ya en 2020 este valdeorrés se animó a seguir el rastro. "Seguín as pegadas do oso ata o Camiño dos Arreeiros, cerca de Lardeira, onde as perdimos. Non sei se se foi pola zona da Cabreira (León)".