Ángel García Isla, 83 años, reconoció ayer ante la magistrada del Juzgado de lo Penal 1 que cogió una azada y golpeó brutalmente a tres cabras, hasta el punto en que una de ellas murió a los dos días. El inculpado, acusado de tres delitos de maltrato animal, no llegó a testificar ante el acuerdo alcanzado entre su letrada y el fiscal: nueve meses de prisión y 2.000 euros que deberá abonar a la dueña de los animales.
Los hechos ocurrieron sobre las tres y media de la tarde del día 1 de septiembre de 2011 en O Bolo, cuando el octogenario arremetió contra las cabras que habían entrado en su finca. Una de ellas murió a consecuencia de los golpes en los cuernos, cuello y las heridas en el costillar.
Santiago Pérez, el marido de la propietaria de los animales, cogió un palo en la mano y se dirigió hacia él con frases amenazantes: O ano pasado escupinche na cara e este ano voute votar para o cementerio. Por esta falta de amenazas, el juzgado lo penará con 10 días multa (a razón de tres euros).
Santiago Pérez, el marido de la propietaria de los animales, cogió un palo en la mano y se dirigió hacia él con frases amenazantes: O ano pasado escupinche na cara e este ano voute votar para o cementerio. Por esta falta de amenazas, el juzgado lo penará con 10 días multa (a razón de tres euros).