La imagen del tramo vilamartinés del Camiño de Inverno variará notablemente con la finalización de los trabajos de plantación de árboles que promovió el Concello en el área recreativa de O Bañadoiro. La tala de los chopos que amenazaban con caer sobre los peatones que disfrutan de esta zona de esparcimiento, acometida por la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil, fue seguida de su sustitución.
El alcalde, Enrique Álvarez Barreiro, apuntó a este respecto que el tramo de la orilla derecha del río Sil en el que se realizó la corta fue objeto de una plantación de árboles de ribera, fresnos y abedules, entre otras especies. Estos trabajos fueron relizados por operarios de la empresa pública autonómica Seaga.
La citada plantación de árboles no es la única que proyectó el Concello. El obradoiro de emprego “Valdeorras Embelece”, que Vilamartín comparte con Petín y O Barco de Valdeorras y que forma a una veintena de alumnos -8 de ellos en materia de carpintería y los 12 restantes en jardinería- continuará repartiendo árboles a lo largo del tramo del tramo vilamartinés del Camiño de Inverno. En este caso frutales. Álvarez indicó que estos trabajos permitirán a los peregrinos disfrutar de la fruta de esos árboles a su paso por el tramo vilamartinés, si bien la posibilidad de coger sus frutos “está aberta a todo o mundo”.
La plantación coincide con el convenio de Concello y Confederación para financiar la remodelación del área recreativa de O Bañadoiro, con un presupuesto de aproximadamente 1,28 millones de euros.
