El sector del vino confía en la retirada de aranceles de EEUU

La pandemia del covid-19 castiga duramente al sector vitivinícola, y no solo por el cierre del canal Horeca (hoteles, restaurantes y cafeterías) durante el confinamiento y por las restricciones, también las ventas en el exterior cayeron en las denominaciones de origen de la provincia. A las limitaciones que provocó la crisis sanitaria, se sumaron la incertidumbre que el Brexit genera entre los importadores del Reino Unido, así como la pérdida de competitividad en el mercado de Estados Unidos a raíz de la aplicación de los aranceles que impuso el Ejecutivo republicano de Donald Trump. En este último caso, la entrada en el Gobierno del demócrata Joe Biden abrió la puerta a la esperanza de un cambio en la situación actual. La D.O. Valdeorras exportó 109.202 litros entre los meses de agosto de 2019 y 2020, un volumen de vino que es inferior a la mitad de los 220.665 de la campaña anterior. La bajada alcanzó un 50,5 %, según los datos facilitados por las bodegas. Las firmas valdeorresas tienen en Estados Unidos (21.715 litros) y el Reino Unido (19.286) a sus mayores clientes y las exportaciones a estos dos países durante el periodo anterior alcanzaron los 71.305 y 50.104 litros, respectivamente. El presidente del Consello Regulador de la D. O. Valdeorras, José Luis García Pando, confirmó que los problemas generados por la pandemia fueron agravados "co Brexit e os aranceis de Estados Unidos". En todo caso, confía en que el mercado estadounidense recupere la normalidad y sean retirados los aranceles del 25% que el Gobierno Trump aplicó como castigo por las ayudas que Europa concedió a Airbus. Ahora, la situación es la contraria y es la Unión Europea la que ha acordado sancionar, también con nuevos impuestos, a EEUU por las subvenciones que concedió a otro fabricante de aviones: Boeing. A este respecto, Bruselas ya ha iniciado los contactos con el nuevo equipo presidencial americano. Alemania (6.786 litros), Holanda (6.710) y Bélgica (5.539) ocupan los puestos siguientes en la relación de clientes europeos de las bodegas valdeorresea, si bien cabe reseñar el aumento de la demanda desde los mercados nórdicos, como Dinamarca (2.832 litros) y Suecia (2.801). En el continente americano, después de Estados Unidos, está posicionado Canadá, que importó 6.599 litros, en tanto que en Asia sobresalen las ventas a Japón, que consumió 3.472 litros en este año atípico. El mercado de la Unión Europea concentra los pedidos del extranjero, que alcanzaron los 58.335 litros. A su vez, desde el continente americano demandaron 36.021, en tanto que el resto de países europeos importó 7.005, Asia 5.970 y Oceanía 1.872. Los blancos, con el godello a la cabeza, acaparan la atención de los mercados exteriores. El bum de estos caldos sigue acaparando la atención internacional, siendo 89.171 los litros que salieron de las bodegas de la D. O. Valdeorras con destino en el extranjero. A su vez, la exportación de tintos, entre los que sobresale la variedad mencía, movió 20.031 litros. La campaña anterior, estos datos fueron muy superiores, alcanzando los 181.675 litros en blancos y 38.990 en tintos. A estas alturas del año, y con las Navidades a las puertas, en España las ventas siguen centrándose "na alimentación e pouco máis", según apuntó el presidente del Consello. José Luis García añadió que, en estos momentos, Madrid es una de las pocas zonas con movimiento en la venta de vino. Funciona el mercado "online", pero el presidente del organismo vitivinícola valdeorrés no lo considera una alternativa a los canales de siempre. "Algo sempre funciona, mais son cantidades moi pequenas e, ademais, é traballoso", explicó. Pero no todo son desventajas en este método de comercialización, también tiene un lado positivo que puede encontrarse en el factor fidelización de los compradores, pues normalmente suelen volver a realizar encargos a las bodegas suministradoras. "É algo bo. Os clientes sempre soen repetir", dijo García Pando. En todo caso, la alternativa de las compras a través de internet pueden ser un recurso a nivel nacional, pero difícilmente ayudarán a frenar el descenso de las ventas en los mercados exteriores. "Colgar en Amazon desbotouse porque é complicado", comentó. También descartó otras opciones de venta "online" a otros países, debido a las excesivas dificultades que suponen las diferentes legislaciones e impuestos que rigen estas operaciones. La situación que atraviesan las bodegas no es la mejor, pero aún cabe la esperanza de que quede atrás muy pronto, quizá en las próximas semanas. "Toca aguantar, a ver se co Aninovo mellora", remachó José Luis García. La pandemia "desestabilizou" un mercado que explora nuevas vías Las bodegas de Monterrei, Ribeira Sacra y Ribeiro comienzan a entrar en los mercados exteriores y sus exportaciones también acusaron los efectos de la pandemia. En la Denominación de Orixe Monterrei se destina aproximadamente un 7 % del vino producido a la exportación. A falta de los datos del volumen de ventas, la presidenta del Consello Regulador, Lara Da Silva Rodríguez, confirmó que "a pandemia desestabilizou o mercado de maneira global". Bajo la amenaza del Brexit, los importadores del Reino Unido comienzan a interesarse por estos vinos, lo cual avala las campañas promocionales que desarrolló el Consello Regulador. Su presidenta, Da Silva Rodríguez, explicó que "empézase a crear marca". En la actualidad, los caldos de Monterrei encuentran salida principalmente en el Reino Unido, Holanda, Alemania y Estados Unidos. La situación que atraviesa el sector llevó a la presidenta del Consello a hacer un llamamiento "á calma e á estabilización. É un sector complicado, con moita competencia, mais a vacina está aí". El presidente del Consello Regulador de la Ribeira Sacra, José Manuel Rodríguez González, apuntó que estos caldos, que ya están presentes en el mercado estadounidense, "están entrando ben nos de Noruega e Dinamarca". Indicó que el cierre del canal Horeca perjudicó principalmente a las bodegas pequeñas, que no venden a las grandes cadenas de alimentación, pues estas siguieron trabajando. La caída de la venta en la Denominación de Orixe de O Ribeiro, provocada por el cierre de la hostelería, llevó a bodegueros y "colleiteiros" a buscar otras vías de salida para sus caldos, incidiendo en los mercados exteriores. Por el momento, no obstante, supone una mínima parte de la producción, ya que esta denominación vende la mayor parte -en torno al 65%- en Galicia. Así, en el caso de la Cooperativa Viña Costeira, que representa alrededor del 35% de la producción de O Ribeiro, solamente exporta un 10% de su volumen, aunque este año apostó por la apertura de nuevos mercados, con un incremento del 35%.