Fueron realizados por una empresa en el Bierzo que llenó autobuses de agricultores gallegos
Una investigación iniciada por los agentes del Seprona (Servicio de Protección de la Naturelaza), de la Guardia Civil, amenaza la convalidación de cientos de carnés de manipulador de productos fitosanitarios, entregados por una empresa que organizó cursos en la comarca del Bierzo. Esta demora, que ya se prolonga varias semanas, fue confirmada por la Consellería do Medio Rural, donde están a la espera de que los agentes finalicen su trabajo para responder a las solicitudes que recibieron. En todo caso, en este departamento descartaron rotundamente que estuviesen negando la convalidación de los permisos y aseguraron que antes de la investigación los estaban dando. "Al haber una investigación, se está a la espera", afirmaron en este departamento.
Los usuarios de productos fitosanitarios deben presentar el correspondiente carné de manipulador en el momento de la compra. Esta obligación entró en vigor el 23 de noviembre de 2015, según recoge el Real Decreto 1311/2012. Desde entonces, las tiendas que comercializan estos productos están sometidas a un estrecho control. "La inspección vino más de una vez. Ahora estamos vigilados", explicó el propietario de un negocio de venta de estas sustancias.
Esta obligatoriedad, sumada a los escasos cursos promovidos en Galicia, llevaron a muchos agricultores a inscribirse en los cursos on-line que organizó una empresa autorizada por la Junta de Castilla y León, según informaron en la Consellería do Medio Rural. Finalizadas las clases teóricas, que fueron impartidas por Internet, los matriculados se desplazaban hasta la comarca vecina al objeto de asistir al examen que les permitiría obtener el diploma. La inscripción tenía un coste de aproximadamente 130 euros, muy por encima de los 9 que cuestan las tasas que deben abonar quienes se anotan a las clases de la Xunta. Sin embargo, tenía una gran ventaja: poder obtener la acreditación en solo un día, bien en sábado o en domingo. Los inscritos podían adquirir los conocimientos teóricos en sus casas, a través de Internet. El curso sale más barato a quienes se inscriben en las oficinas agrarias de Medio Rural. Eso sí, están obligados a asistir a clases durante nueve días. Todos estos factores propiciaron una auténtica avalancha de productores gallegos que optaron por los cursos del Bierzo
El problema llegó con la investigación inicada por el Seprona, ante la posibilidad de que los diplomas fuesen entregados fraudulentamente, con demasiada alegría, incluso a gente que hasta carece de equipo informático.
"Para muchos fue la única forma de sacar el curso", comentó un vendedor valdeorrés de productos fitosanitarios. Añadió que la necesidad de obtener el citado carné se tradujo en largas listas de espera en las oficinas de la Xunta.
La escasez de cursos pareció entrar en vías de solución en los últimos días, comenzando a proliferar las empresas y academias valdeorresas y gallegas que organizan cursos de manipulador de productos fitosanitarios, con el visto bueno de la Administración autonómica.
