Las cartas del Ministerio de Hacienda que está recibiendo un buen número de vecinos de A Veiga fueron recibidas con un sinfín de críticas por la población. Basándose en una modificación del planeamiento urbanístico de 1997, el citado organismo procedió a la revisión del valor catastral de las propiedades.
El escrito anuncia que terrenos que estaban considerados rústicos pasen a ser de suelo de naturaleza urbana, aumentando considerablemente su valor catastral. Esta modificación movilizó a numerosos vecinos que ya comenzaron a preparar sus recursos y reclamaciones ante el Ministerio de Hacienda.
Entre los críticos de esta decisión está el alcalde de A Veiga, Juan Anta Rodríguez. "Estou en contra da maneira de facelo e que metan todas as fincas no solo urbán, con independencia de que teñan acceso ou non, sexan grandes ou pequenas, edificables ou non", protestó el regidor.
Anta Rodríguez consideró un error que el Ministerio de Hacienda "homoxenice tódalas fincas" en base a un plan urbanístico que data de hace 24 años y también que acuerde aplicar esta modificación en estos momentos, coincidiendo con la crisis de la pandemia del covid-19.
