Un grupo de jóvenes incorformistas de O Barco decidió que el Salgueiral no podía seguir sucio. Un llamamiento realizado por las redes sociales reunió a la decena de voluntarios que ayer retiró todo tipo de basura.
Uno de los pulmones de O Barco, el Salgueiral, llevaba demasiado tiempo acumulando basura. Ayer, un grupo de jóvenes barquenses puso fin a esta situación. Un llamamiento lanzado por las redes sociales y la colaboración de Riadá Cidadá permitieron que, en apenas hora y media, desaparecieran los desechos abandonados en el área recreativa.
Los residuos recogidos en 90 minutos son de procedencias muy distintas. Además de un par de neumáticos de camión, el grupo recuperó una garrafa de sustancias químicas que llevaba en el paseo barquense unas tres décadas e incluso la pieza de una máquina utilizada en la polémica tala de árboles que, en los últimos meses, realizó en este paraje la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil.
Diego Álvarez "Chimeno" rechazó cualquier papel protagonista en la convocatoria, pues insistió en que la iniciativa comenzó a cocerse hace muchos meses, en conversaciones con otros jóvenes inquietos. Seguramente fue así, pero él formó parte del reducido grupo que impulsó la convocatoria de ayer.
"Fai falta que este tipo de accións se multipliquen, pois abren portas a outras", comentó "Chimeno" cuando se encaminaba al punto de encuentro, cargado con una bolsa de basura. Tener el domicilio familiar en O Barco no le impidió hacer una cerrada defensa de la comarca. "É unha chamada de atención que debería ser comarcal. Hai que cuidar os montes. En Valdeorras, cando se agote a pizarra, non temos outro recurso", explicó.
La limpieza se desarrolló en un área recreativa de la que desaparecieron muchas decenas de árboles, en una acción polémica, a la que también aludió Diego Álvarez. Entre tocones, "Chimeno" expuso que "si queres quitar unha árbore, planta outra. Non importa talar un exemplar enfermo, mais hai que cambialo por outro", dijo.
A la cita también acudió el concejal de Riada Cidadá Félix García Yáñez, para quien la iniciativa del grupo de jóvenes permitió "denunciar unha zona de O Barco abandoada en limpeza. Non están limpando O Salgueiral periódicamente", expresó. El político barquense tiene claro que, si el área recreativa de la villa recibiese mejores cuidados del Concello, "usaríase máis".
