La caída de los termómetros vacía de público la mayor parte de las piscinas
Un giro en la evolución meteorológica ha provocado un cambio drástico en los usos de muchos ourensanos para los momentos de ocio del mes de agosto. Con el descenso térmico y los cielos cubiertos se han vaciado los espacios públicos en los que hay piscinas y las dotaciones anexas, sobre todo pequeñas cafeterías. Parece como si el otoño se hubiese adelantado, aunque las previsiones anuncian a que con la llegada del fin de semana habrá una recuperación térmica, con máximas que pueden llegar a los 33 grados el sábado, según Meteogalicia.
Los modelos meteorológicos anuncian también un septiembre con termómetros al alza, lo que provocará un efecto llamada de nuevo sobre las piscinas y demás espacios de recreo. De hecho gran parte de los concellos que cuentan con piscinas públicas mantienen la previsión de mantener estos recintos abiertos hasta mediados de septiembre.
La afluencia a las piscinas en estos últimos días contrasta con la registrada a comienzos de este mes, con temperaturas por encima de los 30 grados y, sobre todo, con las registradas en julio, un mes que se ha caracterizado por un importante rigor térmico en casi toda la provincia.
