RINCÓN DEL VERANO

Para disfrutar del viaje no es necesario irse muy lejos

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photo_camera El fotógrafo, en uno de los lugares donde consigue desconectar totalmente, Allariz.

Jota Barros nos cuenta cómo pasa las vacaciones

Hay pasiones que se manifiestan muy pronto, durante los primeros años de vida. Jota Barros conoce bien esa sensación: su gusto por la fotografía empezó a acompañarlo desde que era un crío. "Aunque durante algunos años, como la carrera o los primeros trabajos, me acompañó de forma latente, esperando el momento de volver a ocupar el sitio que le correspondía", comenta. Y volvió para quedarse, porque ya hace tiempo que Barros se dedica de forma profesional a su pasión, además de impartir clases, tanto en España como en el extranjero, y que su blog se haya convertido en una referencia nacional.

Reconoce que prefiere conocer sitios nuevos, aunque estén cerca de casa, a volver regularmente a los destinos, pero si tiene que escoger un lugar para pasar el período vacacional y descansar, es Tameirón (A Gudiña). "Es el pueblo en el que aún vive mi abuelo Papá Pepe y donde, entre recuerdos de mi niñez, desconecto absolutamente de todo", afirma el fotógrafo. "Unas horas o unos días allí consiguen recargarme las pilas por completo", comenta.
Gracias a su trabajo ha viajado mucho, y como urbanita que reconoce ser, los destinos han estado entre las ciudades más grandes del mundo. Entre los lugares visitados escoge Japón, debido a su civismo y a su perfecta mezcla entre espiritualidad y modernidad. No obstante, afirma que no es importante el lugar, ya que "viajar siempre es una experiencia muy enriquecedora, y para disfrutar de ella no debería ser necesario irse muy lejos".

Fotografía: ROMÁN NOVOA

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