La mejor carne de vaca autóctona volvió a congregar a un numeroso público en Quintela de Leirado durante la sexta edición de la Festa da vaca cachena. En esta ocasión, fueron casi 1.200 los comensales que degustaron platos de carne, amén de buen vino y ricos postres. La carpa instalada por el Ayuntamiento se quedó pequeña para acoger a visitantes de toda Galicia y el Norte de Portugal.
Un año más, la mejor carne de vacuno autóctono fue la estrella de la jornada gastronómica dedicada a la carne cachena en Quintela de Leirado. La sexta edición de la Festa da Carne Cachena, un ganado que se cría en libertad en las tierras de Quintela, fue un éxito absoluto, en palabras del alcalde, José Antonio Pérez.
Ya desde primera hora del mediodía resultó muy difícil encontrar aparcamiento en las principales calles de la villa de Quintela de Leirado. Y es que no sólo acudieron vecinos del municipio, sino que llegaron a la fiesta cientos de visitantes de toda Galicia y del Norte de Portugal.
El menú, como siempre, muy carnívoro. Empanada de carne de cachena, carne cocida y carne richada, regada con buenos caldos y complementada con sabrosos postres caseros.
En total, fueron cerca de 1.200 las personas que degustaron las viandas en la carpa instalada junto a la Casa Consistorial a un precio módico de ocho euros.
El regidor municipal expuso que esta feria va a más año tras año y la verdad es que ya no tenemos casi sitio para acoger a más comensales, pese a que instalamos una carpa enorme. El año pasado fuimos 900 y hoy (por ayer) superamos los 1.100.
El alcalde abogó por la continuidad de una celebración absolutamente consolidada en el panorama festivo de finales de agosto en Ourense.
Ya desde primera hora del mediodía resultó muy difícil encontrar aparcamiento en las principales calles de la villa de Quintela de Leirado. Y es que no sólo acudieron vecinos del municipio, sino que llegaron a la fiesta cientos de visitantes de toda Galicia y del Norte de Portugal.
El menú, como siempre, muy carnívoro. Empanada de carne de cachena, carne cocida y carne richada, regada con buenos caldos y complementada con sabrosos postres caseros.
En total, fueron cerca de 1.200 las personas que degustaron las viandas en la carpa instalada junto a la Casa Consistorial a un precio módico de ocho euros.
El regidor municipal expuso que esta feria va a más año tras año y la verdad es que ya no tenemos casi sitio para acoger a más comensales, pese a que instalamos una carpa enorme. El año pasado fuimos 900 y hoy (por ayer) superamos los 1.100.
El alcalde abogó por la continuidad de una celebración absolutamente consolidada en el panorama festivo de finales de agosto en Ourense.
