La naturaleza ha regalado a Ourense estas aguas mágicas con propiedades terapéuticas certificadas. Y para disfrutar de lo que tenemos, no hay mejor opción que marcarse una ruta por estas joyas de agua caliente.
Ser la segunda ciudad europea con más riqueza termal es algo de lo que deberíamos presumir todos los días. Capital del termalismo, de los spas al aire libre sin trampa ni cartón: la naturaleza ha regalado a Ourense estas aguas mágicas con propiedades terapéuticas certificadas. Y para disfrutar de lo que tenemos, no hay mejor opción que marcarse una ruta por estas joyas de agua caliente.
Termas de A Chavasqueira
Son las más pequeñas pero las más cercanas al centro de la ciudad, así que no son de extrañar las estampas de gente abarrotando este idílico lugar. En A Chavasqueira el agua mana a más de 60ºC, pero para el baño hay una temperatura de 43ºC. Para los días más calurosos, conformarse con admirar el paisaje que deja el Miño o tumbarse al sol en el cesped que hay en el entorno de las pozas es más que suficiente.
Termas de Outariz 
Tomar el tren turístico como un guiri más en la Praza Maior es tarea obligada para todo ourensano. Llegar hasta las pozas más grandes de la provincia es motivo más que suficiente. Una pasarela peatonal separa las Burgas de Canedo y las Pozas de Outariz. Hasta seis pozas de agua caliente y dos frías esperan al viajero para una jornada de relax. Otra buena forma de llegar hasta aquí es después de una buena caminata por el paseo de las Ninfas, que conecta con la otra ribera del río.
Termas do Muíño da Veiga
Se encuentran en la zona de Quintela de Canedo, a tan solo medio kilómetro de las de Outariz. No son las más conocidas fuera de nuestras fronteras, pero su encanto gana adeptos cada noche de verano, momento ideal para disfrutar de sus aguas. Las termas do Muíño da Veiga toman su nombre del antiguo molino de madera que se ha rehabilitado a su alrededor para acompañar un paisaje de cinco pozas de agua caliente que miran hacia nuestro río, el Miño.
Termas de O Prexigueiro
Hay que alejarse de la ciudad para llegar a este pequeño rincón en el concello de Ribadavia. Las termas de O Prexigueiro son de pago, pero merece la pena dejarse poco más de cinco euros para disfrutar de un auténtico circuito japonés que añade su toque gallego empleando las uvas treixadura y mencía en sus tratamientos. Cinco pozas de agua caliente, un spa y dos d agua fría componen la oferta del complejo termal.
Piscina termal
Una piscina al aire libre, con agua caliente y vistas a uno de los cascos históricos más bonitos, el de Ourense. La obra se hizo realidad hace seis años, en las inmediaciones de la Burga de Abaixo, la fuente más emblemática de Auria por la que cada día pasan cientos de turistas. Acercarse al Centro de Interpretación de As Burgas para conocer un poco más sobre el patrimonio termal y arqueológico de Ourense es una buena forma de terminar la experiencia "acuática".
