Ingredientes: 900 gr. de carne de pollo picada; 1 puñado de tomate secos; 3 huevos; perejil picadito o seco; ajo molido; sal; pimienta negra molida; 100 ml. de nata líquida de cocinar o de montar; jamón serrano para forrar el molde; espinacas frescas y pimiento de piquillo.
Precalentamos el horno a 160º calor arriba y abajo.
Lo primero picaremos la carne de pollo o la compráis ya picada. Picad también los tomates secos y añadir a la carne de pollo mezclando bien.
La aderezo con sal, pimienta, ajo y perejil al gusto. Añadimos los huevos y la nata. Mezclamos bien para que coja todos los aromas.
Preparamos nuestro molde colocando las lonchas de jamón serrano superponiendo un poco unas a otras y dejando que sobresalga parte de la loncha en la parte superior del molde (para luego poner de vuelta sobre la carne)
Cuando tengamos preparado el molde colocamos una tercera parte de la carne y la alisamos bien. Ponemos encima hojas de espinaca, un buen puñado que luego ya sabéis que se merman mucho. Encima de las espinacas colocamos más carne y volvemos a alisar bien.
Solo queda poner encima pimientos del piquillo asado y terminamos cubriendo con la carne que nos queda. Y cerramos con los sobrantes de jamón del molde.
Metemos al horno por 75 minutos a 160º al baño María. Si veis que pasado el tiempo se os tuesta mucho por arriba le ponéis papel de aluminio.
Pinchad antes de sacarlo del horno para comprobar que está cocinado. Sacamos del horno y dejamos enfriar un poco antes de desmoldarlo.
Y ya solo queda disfrutarlo ya sea caliente o frío, lo acompañáis de ensalada, de patatas fritas, de arroz… vosotros elegís el acompañante.
