La solidaridad por bandera

Ha pasado más de año y medio y acercándonos irremediablemente hacia los dos años desde que comenzó la pandemia del covid-19. Cruz Roja, Cáritas, Banco de Alimentos, Amencer y Solidaridad Motera son algunas de las entidades que siempre han apoyado a los sectores más desfavorecidos de la sociedad, y que en este tiempo su actividad se ha intensificado, esquivando las “zancadillas” que el covid les fue haciendo, saliendo más unidos y mostrando su fortaleza. Gran parte de esa fuerza está en vosotros, en todos aquellos que colaboráis con ellos con lo que podéis. Desde un kilo de alimentos, a ese juguete que vuestra hija o hijo ya no quiere, pero que está en perfecto estado, hasta vuestra colaboración como voluntarios. Vosotros. Ellos. Sois esenciales. El año 2021 comenzó con la esperanza de las vacunas y de que el año acabase con mascarillas fuera y el covid doblegado. Nadie se imaginaba que seguiríamos en esta delicada situación en la que tiene que imperar el sentido común y seguir las normas que nos van dictando las autoridades sanitarias para poder seguir celebrando la vida juntos. “La pandemia, en contra de lo que todos esperábamos y deseábamos, sigue. Y nosotros seguimos con nuestro trabajo, aún con más fuerza que antes de que llegase a nuestras vidas. Sí que es verdad que ya no hay la tensión de los primeros meses, pero continúa. Y la gente sigue necesitando ayuda y, dentro de nuestras posibilidades y gracias a la ayuda de otras personas, hacemos todo lo que podemos”, comenta Felipe Ferreiro, presidente provincial de la Cruz Roja. María Tabarés, directora de Cáritas, reafirma la opinión de Felipe. “Nadie pensó que esto durase tanto. El boom del principio ha pasado, pero la gente era solidaria y lo sigue siendo. Es consciente de que hay sectores muy castigados y, en la medida de lo posible, colabora". En este 2021 el Banco de Alimentos, no solo a nivel de Ourense, sino a nivel de España, ha visto mermado los donativos, pero son conscientes de que la situación de incertidumbre de que la recuperación económica no vaya tan rápido como pensábamos, la subida del precio de la cesta de la compra, de la luz… hacen mella. “Con todo, la gente es muy solidaria. Además, contamos con el apoyo de las instituciones como la Diputación de Ourense, que, una vez más se supera en colaboración; de Medio Rural que dona alimentos con Denominación de Origen; de Política Social; del Parlamento firmando acuerdos de colaboración, y del Inorde con generosos donativos de productos tan esenciales como las patatas. Y también empresas privadas como Coren, que en estas fechas dona productos típicos para que todos disfruten de la gastronomía de Navidad. En este sentido también quiero resaltar que la gente es consciente y cuando hace la compra para ellos, siempre incluye algún producto navideño para que llegue a todas las mesas”, comenta Cecilio Santalices, del Banco de Alimentos. La colaboración de la gente es esencial, pero también lo es la de la figura de los voluntarios. Voluntarios que, en el caso de Amencer, como comenta Xulio César Iglesias, “é moi variable, xa que debido a que a nosa universidade non ofrece todas as saídas que busca a xuventude, vénse obrigados a ir a estudar a outras ciudades co que o número deles vai cambiando. Pero o núcleo duro, aquí seguimos”. Voluntarios que en el caso del Banco de Alimentos, “muchos tuvieron que parar, porque la salud es lo primero y la mayoría eran grupo de riesgo”. Un detalle en el que coincide María Tabarés y que subraya que “con todo, lo positivo es que el perfil del voluntario se ha rejuvenecido. Viene más gente joven a ayudar al comedor. Pero por la semana es gente que tienen que estudiar y trabajar, con lo que seguimos necesitando gente que nos ayude a dar este servicio”. Desde Solidaridaridad Motera, creada en 2014, Juan Carlos Blanco nos cuenta que “al principio fue difícil. Ahora estamos muy contentos con la gente voluntaria. Queremos aclarar que no hace falta tener moto para ser voluntario. Tenemos voluntarios con chaleco, con chaleco y sin moto, y voluntarios que siempre están ahí para echar una mano. Así que aprovecho para pedir más gente solidaria que dedique un ratito a ayudar a los demás”. Algo en lo que todos coinciden y que sienta las bases de las entidades. Un rato de nuestro tiempo, es de gran ayuda para muchos. Además, ser voluntario es mucho más. “La gente siempre dice que recibe más de lo que da. Primero reciben conocimiento de la realidad. Y después la satisfacción de poder ayudar para que la sociedad sea más justa y más humana. El ser humano es social, y el ayudar nos gratifica”, comenta María Tabarés. “Lo que más llena es ayudar a la gente. Esa satisfacción de hacer algo bueno por los demás”, confirma Juan Carlos Blanco. Otro de los aspectos en los que inciden especialmente es en la formación y empleo “para que todos tengan un medio de vida digno que les permita salir adelante por ellos mismos”, comenta María. Desde Cruz Roja también hacen hincapié en este aspecto y agradecen la colaboración de las empresas que ofrecen prácticas remuneradas y una oportunidad de futuro que también les hacen sentir “más capaces y válidos”. Y en Navidad son las niñas y niños especiales protagonistas. Y todos ellos merecen tener un juguete porque ante todos, la infancia es para ser felices y disfrutar. Desde Cruz Roja hacen entrega a los padres de juguetes comprados a la espera de que Papá Noel o los Reyes pasen a recogerlos y, desde Solidaridad Motera llevan a cabo una intensa campaña de recogida desde hace años. “Recogemos los juguetes revisamos y entregamos empaquetados como si fueran totalmente nuevos. Es importante también que los padres eduquen a las niñas y niños en solidaridad. Que sean conscientes de que los juguetes en buen estado con los que ya no juegan puedes hacer felices a otras niñas y niños”. Y para tener unas navidades completas está Amencer, con su amplia propuesta de actividades “que primeiro de xeito online, e logo presencialmente nunca deixamos de manternos activos. Demostrando que se poden facer cousas sen perigo. E. un ano máis, tamén fixemos a Operación Quilo, da que tivemos moi boa resposta”, comenta Xulio César Iglesias, de Amencer. Para finalizar les pedimos un deseo común… no tienen que pensarlo mucho… “que nuestra labor social no fuese necesaria. Significaría que toda la sociedad tiene igualdad de oportunidades”.