VIRAL

El texto viral del barrendero de Gijón pertenece a la escritora Cristina González

La publicación atribuida al trabajador municipal de Gijón fue publicado el 17 de agosto en Aranjuez Magazine

El texto viral atribuido a Julio Cao de la Fuente, el trabajador del servicio de limpieza del ayuntamiento de Gijón, es autoría de la escritora Cristina González Moya. La colaboradora publicó este reportaje el pasado 17 de agosto en la publicación Aranjuez Magazine.

El artículo se hizo viral al compartirlo Julio Cao de La Fuente en su cuenta de Facebook, similando que se trataba de una carta personal en la que narraba aspectos que vivía cada día en su jornada laboral. De hecho, fue compartido por varios medios de comunicación atribuyendo que se trataba de una reflexión del propio barrendero.

Una vez que se supo que se trata de un texto de González Moya, de La Fuente borró la publicación de su cuenta de Facebook.

Julio de la Fuente comenzaba diciendo que es "un barrendero, no un "barremierdas". No hace falta que me admires, sólo que me respetes y valores. Cuando pases por mi lado puedes darme los buenos días, las buenas tardes o noches (según mi turno), porque ante todo soy un ser humano y en la vida valen más la honestidad, humildad y bondad de una persona, que todos sus títulos y dinero juntos".

En el texto, que ya suma más de 2.500 compartidos, añadía que "Si me ves venir de noche no me insultes diciéndome que soy un alienígena, no he bajado de ninguna nave espacial, si llevo uniforme brillante y uso conos reflectivos, es para que me veas en la distancia, por seguridad. No es la primera vez que algún niñato borracho ha estado a punto de atropellarme entre risas. Cuando haya recogido la basura de tu barrio, no salgas de tu casa y tires los desperdicios en la acera para después llamarme a gritos: - "Ahí tienes, barrendero, para que no te falte trabajo". 

Y lamenta y censura actos de poco civismo, por desgracia habituales en estos tiempos. "Cuando pases con el coche no me lances botellas de plástico o papeles de periódico como si fuese tu criado, no me digas desde la ventanilla: - "Recógelo que para eso te pagan", porque menudo ejemplo le estás dando a tus hijos. Estoy triste y cansado. A mí me pagan para dejar las aceras y las calles como los chorros del oro, para pasar la barredera y el cepillo y regar de agua la ciudad, para que al amanecer puedas salir de tu casa y pasear por la calle presumiendo de que tu barrio es el más limpio, el más amplio y el más humano del mundo. 

Te puede interesar