La Guardiana del Bosque acudió al colegio triste y angustiada en busca de ayuda ya que el otoño había desaparecido.
El alumnado de cinco años del colegio Padre Feijoo Zorelle recibió recientemente unha visita muy especial. La Guardiana del Bosque y el Hada del Otoño, Doradilla, quisieron compartir con los escolares una estupenda jornada llena de magia y fantasía.
La Guardiana del Bosque acudió al colegio triste y angustiada en busca de ayuda ya que el otoño había desaparecido. Los escolares no dudaron en prestarle su ayuda y ofrecerle las hojas que ellos mismos habían recogido semanas antes para darle la bienvenida a esta estación del año. Probaron si las hojas se ajustaban a su capa y si de ese modo podían dar de nuevo la bienvenida al otoño.
Efectivamente, las hojas se pegaban perfectamente y todos juntos lo celebraron. Lo primero que hizo la Guardiana del Bosque fue avisar al Hada del Otoño para que se sumara a la celebración. Posteriormente, todos juntos compartieron una gran fiesta otoñal en la que no faltaron juegos, baile y una gran merienda a base de frutos secos.