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Las lombrices, qué son y cómo tratarlas

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¿Qué son las "lombrices"? ¿Qué aspecto tienen?

Los oxiuros, más comúnmente llamadas lombrices, son unos parásitos intestinales que habitan exclusivamente en el hombre. Son mucho más frecuentes en niños, aunque se contagian con mucha facilidad. Son gusanos cilíndricos y alargados, del tamaño de un fideo fino. Una lombriz adulta es como un filamento blanquecino que puede tener de 0,5 cm a 1 cm de longitud.

En general, afecta a los niños entre los 5 y los 10 años, sobre todo en los meses de colegio. La Asociación Española de Pediatría estima que 1 de cada 2 niños adquiere esta infección debido a la fácil propagación del parásito que la produce. 

Es frecuente la infestación de otros miembros de la familia, que se verá afectada en un periodo entre las 2 a las 4 semanas después del contagio.

¿Cuál es el ciclo de la lombriz?

Para entender cómo se trasmiten los oxiuros y cómo los tratamos es fundamental conocer cuál es su ciclo biológico. Las hembras del parásito depositan los huevos alrededor del ano. A los niños les pica, se rascan y quedan en las uñas, Al meter la mano en la boca se ingieren y cuando llegan al estómago, los huevos se rompen y se liberan las larvas jóvenes. Al cabo de dos a seis semanas, las larvas maduras pasan al intestino delgado y alcanzan el intestino grueso, donde finalmente se alojan. La vida media de una lombriz es de dos meses.

¿Cómo se contagian?

Después de entender cuál es su ciclo biológico resulta fácil deducir el mecanismo de contagio. Se contagian al introducir accidentalmente los huevos que pueden estar en diferentes sitios como areneros, alimentos u objetos contaminados. Hay que tener en cuenta que estos huevos permanecen durante días en ropa interior, toallas, pijamas y sábanas.

La transmisión se conoce como fecal-oral, es decir, requiere de la transmisión de los huevos a la boca desde el ano, donde son ingeridos. Es muy típico que los huevos permanezcan en las uñas de una persona infectada al rascarse por la noche la región perianal y que desde allí vuelvan a entrar en la boca produciendo una nueva infestación.

¿Cómo se diagnostican?

La mayoría de las veces no se necesita ninguna prueba de laboratorio. La visualización de los oxiuros en las heces o en la zona perianal es suficiente para su diagnóstico.

En caso de que éstas no se llegaran a ver se podría realizar un test de Graham. consiste en colocar un celo en la zona del ano, por la noche. Al amanecer (cuando las hembras salen a poner los huevos), para posteriormente mirar en el microscopio si existen huevos.

¿Cuál es su síntoma principal?

El picor es el síntoma principal y en muchas ocasiones es la única manifestación. Un intenso picor anal, en ocasiones también vaginal en el caso de las niñas (En las niñas pueden migrar hacia delante y verse en la vulva), sobre todo nocturno. Los oxiuros son más activos por la noche o al amanecer.

La hembra del gusano sale por la noche al margen anal y deposita los huevos (donde están las larvas). Estos están recubiertos de una sustancia pegajosa que produce irritación y picor. Suelen salir cuando el niño ya lleva dormido 2 o 3 horas.

Debido al picor, los niños no duermen bien, tiene múltiples despertares, a veces irritación de la zona vaginal y lesiones de rascado.

El rechinar de dientes nocturno (bruxismo) se ha asociado con este tipo de infección, pero no ha sido confirmado científicamente que se deba ella.

Y tampoco causan dolor abdominal, falta de apetito, cansancio y no afectan a la ganancia normal de peso.

¿Puedo hacer algo para prevenir?

Extremar las medidas de higiene. Cortar las uñas y mantener una buena higiene, ya que los huevos se alojan ahí (aunque no los veamos). Cambio de ropa interior a diario, lavado de toallas y sábanas frecuentemente con agua caliente y como siempre lavado de manos.

¿Cómo se tratan?

El tratamiento es sencillo y muy eficaz. El día que se inicie el tratamiento, todas las sábanas, toallas, pijamas y ropa interior de la noche anterior lo pondremos en lavadora a altas temperaturas (al menos 60ºC), ya que esto destruirá los huevos que hubieran sobrevivido.

El tratamiento sólo destruye las lombrices y no los huevos. Será necesaria una segunda dosis entre 2 y 3 semanas después de la primera, para matar las lombrices que se hayan desarrollado a partir de los huevos que quedaron durante este período. Y volverá a repetirse de nuevo todo el protocolo: lavadoras, uñas, ducha y dosis de nuevo del tratamiento.

Si los oxiuros reaparecen, se deberá más probablemente a una reinfección que a un fallo en el tratamiento.

Dado que puede haber portadores asintomáticos también se recomienda que el tratamiento lo realice toda la familia.

Pero además del tratamiento farmacológico, hay que realizar una serie de medidas higiénicas para evitar la reinfestación.

Para aliviar el picor se recomiendan baños de asiento o aplicación de
soluciones o pomadas calmantes (consultar con su pediatra).

El tratamiento se realizará en niños mayores de 2 años.

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